Fue el acontecimiento más esperado del año. Pasadas las 02.30, el palacio de la Zazuela informó a los periodistas del evento, con estas palabras: "La Princesa de Asturias acaba de dar a luz a una niña". Se trataba de la Infanta Leonor, primogénita de Felipe de Borbón y Grecia, heredero de la corona española.

 

Pasadas las 12 horas, los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, acudieron al hospital Ruber Internacional para conocer a su nueva nieta y felicitar a su hijo y a su nuera. Los monarcas saludaron al casi centenar de personas que allí se congregaban pero no hicieron declaraciones a su entrada al centro hospitalario. Los padres de la Princesa, Jesús Ortiz y Paloma Rocasolano, y su abuela, Menchu Álvarez del Valle, también fueron a la clínica. A su salida, los Reyes se mostraron encantados con la Infanta Leonor, a quien la Reina describió como "gordita y redonda" a preguntas de la prensa. Tras permanecer hora y media con los Príncipes de Asturias, los monarcas dijeron estar "contentísimos" y, en opinión de la Reina, la pequeña "es una mezcla de todos". El Rey no quiso, sin embargo, pronunciarse sobre parecido alguno y dijo que "es muy difícil sacar parecidos a un recién nacido". "La apuesta la he perdido", dijo la Reina en relación con el sexo del bebé.

 

Minutos antes de la seis de la mañana, el padre salió al encuentro de los periodistas que llevaban narrando el acontecimiento durante toda la madrugada. "Es una niña grande y parece que fuerte", exclamó visiblemente emocionado. La niña pesó al nacer 3,5 kilos y medía 47 centímetros. El orgulloso padre explicó que precisamente por tratarse de una cesárea, estuvo muy pendiente de la Princesa: "Y en el primer momento de salir (la niña), ni me fijé. Y creo que les dije cuando ya habían retirado al bebé: 'pero bueno, ¿qué ha sido? Y me lo confirmaron", relató el padre.

 

El hecho sucesorio

 

El Gobierno tiene prevista una modificación de la Constitución en cuatro apartados, y uno de ellos es el relativo al artículo 57.1, sobre la sucesión a la Corona, para facilitar la igualdad de sexos. El Consejo de Estado está realizando el estudio correspondiente y el Ejecutivo prevé que al final de la legislatura pueda abordarse esa reforma, que requeriría la convocatoria de elecciones y un posterior referéndum. Según el presidente del Gobierno, "nuestra Monarquía, la Monarquía parlamentaria, la Monarquía constitucional, viene desempeñando desde la Transición una incuestionable función de integración política, social y territorial al servicio de todos los españoles". Estas palabras las pronunció horas antes de defender el Estatuto catalán.