Juicio 11M: Sesión 28
La risa de los etarras y las notas desaparecidas


El inter�s inicial de la sesi�n se centr� en el testimonio de tres etarras. Estaba la duda de si reconocer�an esta vez al tribunal. Desde el principio dejaron claro que no ten�an mucho inter�s en colaborar con la justicia y, entre risas, negaron todas las preguntas o dijeron no recordar nada. Ni cu�ndo viajaron a Madrid en la caravana de la muerte, ni qu� explosivos transportaban, ni de d�nde salieron... G�mez Berm�dez les tuvo que llamar la atenci�n varias veces. S�lo se esforzaron algo m�s para decir que ni conoc�an a "El Chino" ni ten�an lazos con islamistas. Esos, los dos etarras detenidos en Cuenca con una furgoneta cargada con media tonelada de dinamita. El tercero en declarar, el sanguinario Henri Parot no supo explicar por qu� su nombre y datos de contacto estaban en poder del lugarteniente de Lamari, muerto en Legan�s, y qui�n le hab�a facilitado la f�rmula de la cloratita.

La sesi�n sirvi� tambi�n para confirmar informaciones y abrir nuevas inc�gnitas. Entre las primeras, un miembro de la Polic�a Cient�fica corrobor� la operaci�n de los GEO en Albolote horas antes de que el piso de Legan�s volara por los aires. Tambi�n confirm� que el aviso de llegada de la furgoneta Kangoo a Canillas se dio una hora despu�s de cuando realmente sucedi�. De la furgoneta dijo que tras el precinto s�lo vio "cuatro cositas desperdigadas". Pero cuando el juez le mostr� la lista de 61 objetos que figura en el sumario, y que desvel� El Mundo, dijo reconocerlos. Entre las inc�gnitas, la destrucci�n de notas de Cartagena ordenadas por el juzgado de Garz�n, dirigido entonces por Marlaska.

Tambi�n declar� el ex jefe de la Comisar�a General de la Polic�a Cient�fica. Carlos Corrales explic� que la cadena de custodia fue durante el 11-M contraria a la normativa vigente porque en ning�n caso se especific� la procedencia de las tres muestras recogidas, as� como qui�n o cu�ndo se recogieron. Esas muestras llegaron sin la correcta identificaci�n, no se le inform� del tipo de explosivo y �nicamente conoci� los componentes. Sobre a la Kangoo, Corrales afirm� que fue �l quien dio la orden de trasladarla al complejo policial de Canillas y de la bolsa que hab�a en su interior, que fue entregada a los Tedax.

Adem�s, el presidente del tribunal del 11-M orden� deducir testimonio de la declaraci�n de un ciudadano que fue detenido el 14 de marzo de 2004 por llamar a Telemadrid. El testigo relat� que fue llevado a comisar�a y que all� se le comunic� que estaba detenido "por la muerte de 200 personas". El �nico motivo, que hab�a telefoneado a la cadena el mismo d�a en que se recibi� la llamada que revelaba la existencia de un v�deo con los autores de la masacre. El testigo hab�a llamado para preguntar por qu� no informaban de lo que estaba pasando el 14-M. En la comisar�a sufri� el interrogatorio de diez agentes sin recibir la asistencia de un abogado ni una copia de su declaraci�n.

Fueron muchos los testimonios de la jornada. Comenz� con la declaraci�n de varios testigos de los abogados de la acusaci�n. Entre ellos, destac� el de una mujer que denunci� ante la Polic�a que hab�a visto a varios etarras en Chamart�n el 12 de marzo de 2004, cuando se dirig�a a la manifestaci�n. La testigo explic� que los reconoci� porque trabajaba en un Ministerio y hab�a recibido un correo electr�nico con el rostro de varios miembros de ETA. Despu�s, no fue llamada "m�s veces" ni "citada por el instructor". El abogado de Nayo, el confidente huido, se reafirm� en que su cliente, en 2002, advirti� que hab�a una trama de explosivos y armas para suministrar a ETA.


 
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