Un nuevo y pesimo articulo, vacuo, altisonante y futil, como todos los suyos, en el que se limita a criticar a quienes no piensan como usted sin ofrecer una sola solucion para España y, lo que es peor, sin un solo dato que apoye sus palabras.¿Que tal si alguna vez lee a los señores Centeno, Recarte, Rallo, Llamas o Rodriguez Braun?A lo mejor conseguiria usted aprender algo, aunque, si le soy sincero, lo dudo.
¿Habrá manera de que este caballero argumente alguna vez algo? Limitarse a ridiculizar y desacreditar con afirmaciones gratuitas, sin aportar una sola razón, es el mejor homenaje que se puede brindar a lo que no se comprende. En un artículo periodístico, no se precisan análisis en detalle, pero sí resulta oportuno al menos un esbozo de las líneas maestras que articulan y dan consistencia lógica a la proposición.
Asemeja el articulista la antipolítica libertaria con superadas utopías marxistas, pues, nos dice, “el sustrato profundo de ambas devociones es idéntico”. ¡Repámpanos!, se estremece uno ante tal anuncio, ¿qué sorprendentes identidades de fondo, escurridizas al escrutinio superficial, nos va a desvelar este maestro? Ah, no, que se trata tan sólo de apreciaciones subjetivas, de meras y particulares connotaciones de excomunista resabiado enfrentado a sus fantasmas. El parto de los montes.
Que si fanáticos, que si dogmáticos, que si arbitrarios, que si adanistas… Todo eso no son más que meras y baratas descalificaciones estereotipadas, señor mío, al alcance de cualquier idiota. Como usted no lo es, sería de agradecer que se estruje un poco el caletre y rellene con algo más de sustancia su bonito estilo.
Hayek no se limitó a denunciar una fatal arrogancia en abstracto, sino que demostró las fundamentales limitaciones del cálculo económico y político. Lea y pregunte lo que no entienda; critique razonadamente el fondo del asunto, pero no gaste la pólvora en salvas con burletas, trivialidades y comparaciones odiosas.
Para empezar se lo pongo fácil. Aventure una explicación de por qué cree que es necesario coaccionar alguna vez al pacífico que se limita a conducir su vida sin interferir con violencia en la de los demás. Le invito a que tire del hilo de las externalidades y aporte algún argumento convincente de que la política es indispensable
Por último, ni la nación crea el Estado ni viceversa. No mezcle categorías sin necesaria conexión lógica. El Estado lo crean los individuos, no hipostasiados entes abstractos. En consecuencia, no existe más soberanía legítima que la individual ni más estado “natural” que el de Derecho. La ecuación es bien sencilla: los nacionalismos, como cualquier otro socialismo, atacan al individuo y por tanto deben ser combatidos. No creo que ningún nacionalista aplauda a neodinamiteros dispuestos a obligarle a respetar la Ley. El Estado de Derecho, por definición, sólo puede ampliarse.
Y yo que creía que los anarcolactantes que querían dinamitar el sistema eran los autodenominados "indignados"... ¡y ahora resulta que en realidad lo somos los que preferimos las demostradamente verdaderas tesis liberales por encima de las demostradamente falsas tesis antiliberales, tanto de las socialistas (marxistas) como de las anarquistas (también marxistas)!
Ya describió Freud cómo algunas personas proyectan sus propios defectos sobre los demás como forma de protegerse de la vergüenza que les produce el ser conscientes de ellos, como salida cobarde de quien, en lugar de luchas contra sus propios defectos se consuela pensando que son los demás quienes son así.
Menudos artículos escribe el indignado JGC...
[Arra] A Pio Moa se le ha echado de LD, aunque él sí argumentaba en lugar de sólo expeler soflamas. ¿Por qué deben tener su puesto blindado quienes demuestran merecerlo mucho menos que D. Pio? Si al menos JGD argumentase algo en lugar de agitar espantajos inventados, tendría un pase...
Un saludo.
PD: Me da la sensación de que el artículo es algo largo, de que en algunos momentos el autor se abandona a una lírica vacía que puede confundir al lector. Así pues, he decidido destilar los argumentos y, despojados éstos de lo superfluo, redactar un breve resumen con lo troncal, lo nuclear del artículo:
"Fiel neodinamiteros?"
CUERREME
Tan cierto su comentario que casi da un escalofrío... pero me gustaría añadir un pequeño apunte...
Me parece que el uso de la palabra se ha pervertido.
Hoy dia la mayoría de las argumentaciones que se hacen no son más que falacias ad hominem...
Ni los liberales son liberales, ni los socialistas socialistas, ni los derechistas derechistas, ni los catalanes catalanes(ahora son musulmanes) etc.
Me parece un insulto a la inteligencia retorcer el lenguaje hasta hacerlo inútil y vacío de contenido.
Para mí el único signo político es el del Dólar, y en este mundo solo hay 3 partidos políticos:
Los que tienen dinero y poder, los que no tienen dinero y poder, y los que creen que conocen la solucion al problema.
Y el último de ellos es el que más me cabrea.
[Arra] Soy libre de pedir lo que quiera. Lo contrario seria poner la pistola en la nuca de JGD, es decir actuar como lo hace el Estado. Yo defiendo que JGD diga lo que quiera, incluso aunque me parezca infecto, eso es la libertad. Pero eso no es incompatible con que denuncie que nos estan escupiendo a la cara en nuestra propia casa.
[Galipien] "parece un vómito de bilis arrojado sobre la cara del articulista." ¿Y que pretende que ocurra si JGD nos mete los dedos hasta la epiglotis? ¿Que aguantemos el bolo alimentario estoicamente?
"hay que leer despacio para poder apreciar toda la gama de matices" Ve! otra expresion vomitiva como las de JGD. En este caso el vomito lo produce el exceso de edulcorante.
[paserifo] "celosos de la ortodoxia" NO!!!. Celosos de que LibertadDigital no se convierta en un retrete al estilo del "El Pais" o "Pub[l]ico"
Por otra parte si tiene razon en que el Liberalismo puede acabar en totalitarismo o en secta. Algo similar ya ocurrio con Ayn Rand. O como muchas sectas cristianas (Testigos de Jeovah por ejemplo). Por eso es importante el debate y permanecer alerta. Pero el debate, no el pseudo debate de JGD: constantes mentiras, cuando no absurdos, cuando no ataques gratuitos y cuando no, todo lo anterior bien revuelto.
[anderhl]
Si ya se que le han refutado. Pero no directa, abierta y explicitamente. A lo que me refiero es que nadie a sacado un articulo con una alusion del tipo: "En respuesta a JGD" (al menos yo no lo he visto aun, puede que se me haya pasado).
Con todo lo demas estoy absolutamente de acuerdo.
[JoseARui]
Y si no es asi sera a LD a la que le quede poco.
[KingCreo]
Un reportaje abyecto. Solo les falto decir que Friedman tiraba a los disidentes de los aviones.
"el tal von Hayek"...... "EL TAL"??????? esa forma tan distante y dubitativa de refererenciarlo indica que no sabe mucho sobre el. Le recomiendo su obra "La faltal arrogancia" y ya puestos tambien a JGD. Les viene a los dos 'pal pelo'.
Katakrok, muy bueno lo de las llamas y los rallos infernales.
Ahora entiendo por qué echaron al gran showman de Lorenzo Ramírez: ¡no podíamos hacer chistes con su apellido!
Salud y que Dios le bendiga
Vamos a ver si nos aclaramos.
La unión hace la fuerza. Toma una ramita y la partirás sin dificultad. Toma un grueso haz de ramitas y no podrás partirlo por más fuerza que emplees. Este es un tópico literario que tiene más de dos mil seiscientos años de antigüedad. Así empezó Roma antes de ser una república. Este tema de la unión está simbolizado en el escudo de los reyes católicos con el haz de flechas, siendo el yugo una variación del mismo tema. ¿De dónde creéis que toma el «fascismo» la simbología, la temática, la mitología? Y esta idea de la supremacía de la unión sobre el individuo lleva fácilmente a la idea de «Estado» totalitario: eran «fascistas», en tanto que totalitarios, la Italia de Mussolini, la Alemania de los nazis, las Rusias soviéticas, los países asiáticos sometidos por el comunismo, la Siria de hoy, la Libia de hace un cuarto de hora, etcétera.
¿Es posible un liberalismo fascista, un liberalismo totalitario, un liberalismo destructor de la individualidad? Lo veo perfectamente posible leyendo algunos comentarios, que parecen escritos por líctores celosos de la ortodoxia. Pepe García Domínguez, por venir curado de espanto de partidos comunistas y socialistas, ha tomado la penosa tarea de ser el aguafiestas de los totalitarios. También he visto gente religiosa huir y abominar de la esclavitud moral de muchas organizaciones y doctrinas religiosas. Da igual de donde vengas: el liberalismo es el estado mental de quien aborrece la actitud rebañiega, de quien no quiere ser un pez más de un banco de peces, de quien reniega de la colmena y su próspera, pero angustiosa, organización. Quizás sea ingenuo escribiendo esto, pero creo que la naturaleza del hombre es buscar la libertad, y que sólo se asocia con otros por incertidumbre, por miedo, por necesidad de sobrervivir ¡Qué alto precio paga por no querer estar solos!
¿Qué necesidad tenemos de una libertaddigital.com monolítica, monótona, monocromática?
¡Hakuna matata, coño!
Lo de acusar a los demás de adorar al libre mercado como a un nuevo dios es el típico muñeco de paja para despistar de la adoración del propio Pepe por el Estado. Más aún cuando, al parecer, para Pepe es anarquista quien apoya ¡el cierre de RTVE! Sin tele pública viviríamos en la anarquía, parece ser.
Se podrá estar de acuerdo o no con el artículo del Sr. G. Domínguez pero las valoraciones personales aportan poco porque todas las personas tienen el derecho a evolucionar (o no) ideológicamente y adoptar posturas disidentes (o gregarias) sobre lo que estimen conveniente desde el respeto (más en un medio liberal).
Aunque creo que para comprender España hay espacio para distintas aproximaciones (desde los reyes godos a la Renfe) coincido con que las ideas del “estado mínimo” pueden suponer un regalo para los separatismos y que el anarquismo ha vuelto gracias al anarcocapitalismo, que no es más que una variante del liberalismo clásico que prescinde de aquellas ideas de Smith, Mill, etc. que sí otorgaban un papel al estado. El anarcocapitalismo rechaza el idealismo y considera al Estado un producto de la acción humana y, por tanto, puede ser superado. Su objetivo es maximizar la libertad individual (tanto económica como personal) minimizando la influencia del Estado (coercitivo) o cualquier otra institución colectiva (los anarquistas “clásicos” percibirían las relaciones “capitalistas” como una forma más de coacción). Es interesante pero el problema es que sus teorías como la del orden espontáneo (en los mercados o cualquier otro ámbito) son bastante dudosas o si su individualismo metodológico (que requiere de un ser humano racional, moral y (pre)dispuesto a la auto-organización) valdría cuando los individuos decidieran voluntariamente establecer instituciones colectivas (desde la familia a otras más complejas).
El liberalismo se contrapone tanto al socialismo como al conservadurismo en sus muchos matices (en los que cada cual puede reconocerse). El conservadurismo del que habla el Sr. Vidal (tipo Qué significa ser conservador de Kirk) no es igual del que habla Hayek (que, por cierto, pertenece a una escuela económica diferente y con mucha más antigüedad y recorrido académico que la Escuela de Chicago de Friedman esta sí asesora de regímenes dictatoriales) que escribe en Los fundamentos de la libertad: “esa repugnancia que el conservador siente por todo lo nuevo y desusado parece guardar cierta relación con su hostilidad hacia lo internacional y su tendencia al nacionalismo patriotero (…) ese temor a que operen unas fuerzas sociales aparentemente incontroladas explica otras dos características del conservador: su afición al autoritarismo y su incapacidad para comprender el mecanismo de las fuerzas que regulan el mercado”.
Saludos.