Sadam Husein

Un grupo de hasta 150 terroristas ha lanzado un ataque contra varios edificios gubernamentales de la ciudad iraquí de Al-Muqdadiya, incluida una comisaría de Policía, un tribunal y una sede de la coordinación militar iraquí-estadounidense. Según informó el Ministerio del Interior, al menos dieciocho policías y soldados han muerto. Este ataque tiene lugar un día después de que, justo en el tercer aniversario del inicio de la guerra en Irak, veinte personas murieran y más de treinta resultaran heridas en diversos ataques y atentados en varias zonas del país. En la jornada de este lunes también han sido hallados doce cadáveres.

Al menos catorce personas murieron en ataques y enfrentamientos registrados este domingo en Irak en víspera del tercer aniversario de la invasión de este país. Las fuerzas de seguridad han recibido la orden del Gobierno de Bagdad de mantener la alerta para prevenir atentados.

El secretario estadounidense de Defensa, Donald Rumsfeld, opina que los grupos terroristas que operan en Irak "están perdiendo" la guerra y por ello es necesario mantener el despliegue de tropas estadounidenses en territorio iraquí. En un artículo publicado por el periódico The Washington Post bajo el título "Lo que hemos logrado en tres años en Irak", Rumsfeld dice a los detractores de la guerra que deben entender que "la mayoría abrumadora del pueblo iraquí quiere que la coalición (de fuerzas multinacionales encabezada por EEUU) tenga éxito". Una retirada bajo las actuales condiciones, resalta, "sería el equivalente moderno de entregar la Alemania de posguerra a los nazis".

Las unidades de combate estadounidenses e iraquíes que participan en la llamada "Operación Enjambre", considerada como la más amplia ofensiva militar tras el fin de la guerra en Irak, han desmantelado a las afueras de Samarra varios campamentos de entrenamiento donde los grupos terroristas entrenan a los suicidas, montan coches-bomba y fabrican explosivos. Tras la primera jornada del asalto a reductos de terroristas, las autoridades castrenses anunciaron la detención de decenas de criminales. El ministro de Seguridad Nacional iraquí, Andel Karim al-Anzi, afirmó que la ofensiva ha logrado "algunos de sus objetivos".

Un automóvil cargado con una gran cantidad de explosivos ha estallado frente a un restaurante ubicado en el barrio de Talbiya, en el norte de Bagdad. La potente explosión ha provocado importantes daños materiales en el inmueble y destrozado varios autos. Según ha informado la Policía, un civil ha muerto y otros dos permanecen heridos. Para tratar de reducir la violencia terrorista, el Gobierno prohibirá en la capital el tráfico rodado durante dieciocho horas. La medida estará en vigor desde las ocho de la tarde de este miércoles. Este martes, patrullas de la Policía iraquí han localizado más de ochenta cadáveres de personas asesinadas y con signos evidentes de tortura.

Varias patrullas de la Policía de Irak han localizado en diferentes barrios suníes y chiíes de Bagdad unos setenta cadáveres de civiles asesinados. Los cuerpos presentaban signos evidentes de haber sido torturados, un tiro en la cabeza y tenían los ojos vendados y las manos atadas a la espalda. El presidente iraquí Yalal Talaban advirtió que tras el atentado del veintidós de febrero que destruyó la cúpula de un importante santuario chií en Samarra, el país se encuentra al borde de una guerra civil debido a la violencia sectaria. Desde esa fecha, centenares de personas han sido asesinadas en acciones de violencia sectaria, mientras que decenas de mezquitas han sido atacadas.

Cinco atentados terroristas han sacudido cuatro ciudades de Irak en una nueva jornada de violencia que se han cobrado la vida de siete personas. Al menos dos bombas y un automóvil cargado con explosivos estallaron al paso de patrullas de la Policía. En el barrio bagdadí de Ciudad Sadr, han descubierto cuatro cadáveres de chiíes que presentaban impactos de bala en la cabeza. Junto a ellos había una nota escrita: "Esta gente son traidores". La zona fue escenario este domingo de una cadena de atentados con coches-bomba que dejaron 48 muertos.

La Policía de Irak ha confirmado la muerte de al menos diez civiles en tres atentados terroristas registrados en distintos barrios de Bagdad. En el primero de ellos estalló una bomba colocada sobre la carretera que comunica con el barrio de Al-Amiriya. Entre los siete muertos que provocó la explosión se encuentra un niño. En el segundo ataque, un grupo de criminales asesinó a dos trabajadores de una organización no gubernamental en el interior de la llamada "zona verde". El último ha tenido como objetivo una patrulla militar iraquí que circulaba cerca del hospital Yarmuk.

Una patrulla de la Policía iraquí localizó en el interior de un autobús abandonado en el barrio de Al-Jadra, al oeste de Bagdad, los cadáveres de dieciocho personas que fueron asesinadas por terroristas. Poco después, otros agentes encontraban cinco cuerpos de civiles. Uno de ellos presentaba un disparo en la cabeza mientras que el resto tenía marcas en sus cuellos. Todos los cuerpos tenían las manos atadas a la espalda y, según los primeros exámenes, fueron ahorcados. El hallazgo tiene lugar en medio de una ola de violencia sectaria que enfrenta a las comunidades suní y chií.