Diez años después somos un grupo de comunicación. Pequeño y sólido. Con un periódico digital, una televisión local (pero que puede verse en toda España por nuestra web, Imagenio y Ono) y una radio, esRadio, que crece imparablemente. Somos diferentes de otros grupos: tenemos más de 1.000 accionistas (otros 1.500 no han podido suscribir acciones en nuestra última ampliación de capital), no tenemos deudas, nos financiamos sólo con fondos propios y tenemos una sólida posición de liquidez.
Desde que comenzamos a editar nuestro periódico digital hemos sido conscientes de que la única forma de tener, y de conservar, nuestra independencia editorial era atemperar nuestros gastos a nuestros ingresos. Hemos superado un número considerable de crisis gracias a la entrega y el sacrificio de las personas que trabajan en nuestro grupo. No somos, pues, ajenos, sino todo lo contrario, a las dificultades de financiación por las que pasan la mayorÃa de las empresas durante sus primeros años de vida. Pero hemos tenido la suerte de contar, además, con accionistas dispuestos a arriesgar su dinero en un proyecto definido ideol�gicamente como liberal o liberal-conservador.
Ese posicionamiento nos ha colocado en esta terrible crisis polÃtica y econ�mica por la que pasa España, en una posici�n cr�tica frente a la actuaci�n de los partidos polÃticos, del PSOE, del resto de la izquierda, de los nacionalistas, de los oportunistas y del propio PP que, en la peor de las tradiciones del arriolismo, se empeña en el silencio o el populismo.
Nuestro grupo se identifica editorialmente con los españoles que piensan que nuestros polÃticos se han convertido en un problema para superar la crisis. Precisamente por ser liberales, somos conscientes de la importancia de contar con un Estado fuerte, que se ocupe de nuestra seguridad interior y exterior, de que funcione la justicia, se cumplan las leyes y se pongan l�mites estrictos a la intervenci�n p�blica en la vida econ�mica. No creemos –yo, al menos no lo hago–, que ning�n partido polÃtico est� defendiendo estos principios. Por el contrario, la degeneraci�n en el funcionamiento interno de nuestros partidos polÃticos les ha llevado a preocuparse más por acallar la disidencia interna –cada uno en su �mbito territorial–, que por proponer soluciones para superar una catastrófica situación económica a la que ha contribuido el desmantelamiento de la administración central.
En los pr�ximos dos años, los que le restan a RodrÃguez Zapatero como presidente del Gobierno, España tendr� que hacer muchas más reformas de las que hoy se est�n planteando. Econ�micas y polÃticas. Nuestra integraci�n en el euro nos obliga a hacerlas, quieran o no nuestros partidos, nuestros sindicatos, nuestra patronal y nuestro sistema financiero. Reformas dolorosas, cuyo coste habr�a que distribuir con equidad entre los residentes en España. Y si, por desgracia, el Gobierno de RodrÃguez Zapatero no las abordara con decisi�n, nos encontrar�amos con una huida de capitales, nacionales y extranjeros, de peque�os y de grandes ahorradores, que nos colocar�a al borde del abismo.
Nuestro grupo tiene la esperanza de poder contribuir con opiniones editoriales y sirviendo de plataforma para exponer las propuestas de todos nuestros colaboradores a superar esa situaci�n, defendiendo los intereses de la mayorÃa de los españoles. �ste es el momento de la sociedad civil, de la que nuestro grupo, junto con nuestros lectores, oyentes y televidentes, es parte activa. Nos gustar�a poder confiar en el funcionamiento de nuestras instituciones polÃticas, pero no somos capaces de hacerlo, pues cada dÃa que pasa la mayorÃa de las personas que las ocupan nos demuestran que los intereses del grupo de presi�n, polÃtico, sindical o patronal que les ha nombrado son más fuertes que la defensa del bien com�n a la que se comprometieron cuando aceptaron sus nombramientos.
Todos los que participamos en Libertad Digital tenemos la esperanza de que nuestra presencia en los medios de comunicación se fortalezca por la calidad y claridad de nuestra opinión y nuestra información. Durante muchos años más.