Estos ecolojetas de pacotilla hacen lo que sea con tal de conservar sus cochazos y sus casoplones bien surtidos, calientes y cómoditos. Ahora la toman con las pobres mascotas que dan más cariño en un día que lo que está gentuza puede imaginar de lo que es el cariño viviendo toda su puerca y miserable vida. El ascazo que me producen estos piji-progres de salón no es para ser descrito. Pues miren, amigos, antes apretaría el botón que les fulminaría a todos ustedes, panda de aprovechados, que tocar un pelo del más pequeño y gruñón perrito-patada que exista por ahí. Ni te cuento como considero a mi gato de por encima de ustedes. Y a ver si nos hacen el favor de mantener cerraditas esas cloacas que tienen por boca.
Estos ecologistas no tienen en cuenta lo que contamina un ser humano, por ejemplo ellos. Y eso que no dan ni una alegría, cuando nuestras mascotas son tan generosas en ofrecernos momentos divertidos.
POBRECITOS. Y hasta saben hablar.
Si el estudio se ha hecho con el mismo método que usan los ecológistas para los del cambio climático, será tan poco fiable como estos.
Este "estudio" es un insulto a la inteligencia. Pero a qué viene comparar una mascota con una moto? ¿Quién contamina más un perro o un fumador?Si todo el mundo dejara de fumar y el dinero que se gasta en tabaco se destinara al tercer mundo no habría hambre, se reducirian historicamente las tasas de cancer y la contaminación de las colillas y el humo no existirían. Y lo de las heces? El que contamina no es el perro,es el guarro del dueño que no recoje las mierdas. Cabe decir que sin el cariño de las mascotas, la salud emocional de muchos de nosotros se vería reflejada en mas suicidios, más abstentismo laboral y más depresiones. En definitiva, una mascota hace mucho más bien que mal, un todo terreno no es más que un capricho que está de moda y que el 90 % de los dueños jamás los utilizan fuera de la ciudad y que contamina una barbaridad.
No sé, pero a mi me parece que la "huella ecológica" de los seres humanos, dotados del peligroso vicio del libre albedrío debe de ser espantósamente grande, De modo que en aras de un futuro sostenible (no se sabe para quien, pues nuestros nietos y biznietos también dejarán huellas ecológicas de chupe usted y déjeme el cabo) haríamos bien en comenzar aplicar las teorías del profesor ese recién condecorado por Montilla y eliminar a los congéneres mas contaminantes. Yo propongo abrir un ministerio del ecoconsumo, y que cada quien se retrate y nos cuente como ha pasado su vida y si se dedica, por ejemplo, al feo vicio de comer entrecot (las vacas expelen metano por toneladas) o bien hace dieta de fakir.
Lo malo, lo peligroso de todo esto, es que toda esa basura da pie a que gobiernos cada vez mas sedientos de poder y control nos embriden con el pretexto de salvarnos de nosotros mismos.
Lo que les faltaba a los perros, como si ya abandonaran a pocos, y lo que les faltaba a los todoterrenos. Por qué no mejor se estudia el impacto en el medioambiente que tienen los progres, con lo consumistas que son gracias al dinero de las subvenciones y demás corrupciones deben estar haciendo un daño terrible.
Definitivamente hay que huir de la palabra "sostenible". Supongo que sólo se trata de unos tipejos oportunistas dispuestos a hacer dinero a costa de cualquier cosa. Todo esto es como decir que tenemos que cargarnos a todos los animales por el bien de la naturaleza, es como la famosa teoría de "podríamos dispararar a un tercio de la población"... por el bien de la humanidad. El mundo está loco, y memo.
Pero esta gente no tiene ni idea de biología. Cuando se estudian los ciclos tróficos uno se entera de que existen, al final de la cadena alimenticia, unos agentes descomponedores y tal. La naturaleza recicla ella sola las cosas, los animales existen desde hace mucho y nunca ha pasado nada.
Pero esta gente no tiene ni idea de biología. Cuando se estudian los ciclos tróficos uno se entera de que existen, al final de la cadena alimenticia, unos agentes descomponedores y tal. La naturaleza recicla ella sola las cosas, los animales existen desde hace mucho y nunca ha pasado nada.