DECLARACIÓN DEL TESTIGO MANUEL GONZÁLEZ GARCÍA

  1. o En cursiva azul, las preguntas del Ministerio Fiscal y los abogados.

  2. o En normal negro, las respuestas.

  3. oLos comentarios del juez, comienzan por GB

  4. oEn rojo, lo que no se entiende bien y es de libre trascripción.

  5. o NOTA del Transcriptor (n. t.)

Nomenclatura de las partes que intervienen en el interrogatorio:

D. R.GONZÁLEZ Defensa Raúl González Peláez MF BAUTISTA Ministerio Fiscal. Carlos Bautista Samaniego A GERIA Acusación Particular Angélica María Geria Cortés y su hijo menor de edad D LLANO Defensa de Emilio Llano Álvarez GB Presidente del Tribunal – Gómez Bermúdez T Testigo

00:00:00

GB: Buenos días.

T:
Buenos días. GB: ¿Jura usted o promete decir verdad?
T:
Lo juro.
GB: Sabe que si falta a la obligación que acaba de contraer, puede incurrir en un delito de falso testimonio, castigado con pena de prisión, multa y accesoria de inhabilitación. ¿Hay algo, alguna circunstancia, relación con los procesados, alguna condición, alguna cosa que le haya pasado, que puede influir o dificultarle el que diga la verdad?
T:
No.
GB: ¿Tiene alguna relación de parentesco, amistad íntima o enemistad manifiesta con alguno de los procesados?
T:
Con ninguno. GB: Conteste, por favor, a las preguntas que le va a dirigir la Defensa de González Peláez.

00:00:41

D R. GONZÁLEZ: Con la venia. ¿Cuándo empezó a trabajar usted en Mina Conchita?

T: El 23 de enero de 1995.

D R. GONZÁLEZ: ¿Hasta cuándo trabajó usted?

T: Hasta… ¡Ah!, ¿en Mina Conchita?

D R. GONZÁLEZ: ¿Hasta que la cerraron?

T: Sí.

D R. GONZÁLEZ: ¿O dejó de trabajar antes?

T: No, dejé… Bueno, sí, cuando cerraron nos pasaron a la otra mina y la explotación esa dejó de funcionar.

D R. GONZÁLEZ: ¿Con qué nombre le conocen a usted?

T: Con Asturias.

D R. GONZÁLEZ: Asturias.

T: Sí.

D R. GONZÁLEZ: ¿Puede explicarnos cómo era una jornada laboral, ahí en…?

T: ¿La mía, por ejemplo?

D R. GONZÁLEZ: Sí, cuando llegaba, ¿usted era picador?

T: No, yo soy barrenista.

D R. GONZÁLEZ: Barrenista. Pero usted, ¿cogía, al llegar a la mina, cogía detonadores? ¿Cogía explosivos?

T: Por supuesto.

D R. GONZÁLEZ: ¿Cómo cogía los detonadores?

T: Pues, me cambiaba, pedía las llaves al señor vigilante, me las entregaba a mí, o bueno, a otra persona, subimos para arriba donde están los mini-polvorines, abríamos el minipolvorín, y cogíamos los detonadores que nos hacían falta, o que creíamos oportunos. Y bueno, nos íbamos con ellos para el tajo.

D R. GONZÁLEZ: ¿Dónde dejaban la llave?

T: La llave se iba pasando de compañero a compañero, para que fuera abriendo los minipolvorines y al final, pues se dejaba encima de un polvorín para que fuera recogido.

D R. GONZÁLEZ: Ajá. ¿Se dejaba encima del último mini-polvorín…?

T: Del último mini-polvorín, sí. Para que fuera recogida.

00:02:07

D R. GONZÁLEZ: Los explosivos que se utilizaban en el segundo y tercer nivel, ¿los llevaban ustedes a mano?

T: Sí, por supuesto.

D R. GONZÁLEZ: ¿Qué se hacía con el explosivo sobrante?

T: Bueno, pues yo, cuando sobraba, la verdad que lo dejaba allí. Yo, lo que hacían los demás, no lo sé.

D R. GONZÁLEZ: ¿Allí?

T: En el tajo.

D R. GONZÁLEZ: En el tajo. Es decir, ¿se dejaba al aire libre por cerca de la bocamina?

T: No, no, no, yo no he dicho eso, yo he dicho que el explosivo sobrante, se dejaba en el tajo. El tajo no es la entrada de la bocamina, el tajo es el final de la bocamina, o de los picadores…

D R. GONZÁLEZ: ¿Y en el exterior de las bocaminas? ¿Se dejaban también explosivo sobrante?

T: No, no.

D R. GONZÁLEZ: ¿No?

T: Sobrante, no. El sobrante no se sacaba, se dejaba allí.

D R. GONZÁLEZ: ¿Usted no ha manifestado que está cansado de ver cajas en el exterior de las bocaminas?

T: Yo he visto cajas fuera, sí alguna.

D R. GONZÁLEZ: Bien. ¿Alguna? ¿O estaba cansado de verlas? Así lo manifestó usted.

T: Muchas veces las he visto, sí, señor.

D R. GONZÁLEZ: Muchas veces ha visto cajas.

T: Sí, no siempre, pero muchas veces.

D R. GONZÁLEZ: Muchas veces. Al final del día, ¿es cuando quedaban cajas? Usted las puede ver al empezar, pero dijo al final…

T: Al entrar, al salir, yo, como comprenderá, tenía prisa para irme para casa.

D R. GONZÁLEZ: Ajá, usted manifestó también en el Juzgado, folio 46.985, "Al final del día quedaban cajas, los del jornal las introducían para dentro, pero algunas veces quedaban fuera"

T: No, no, no, no creo que yo haya dicho eso, yo he dicho…

D R. GONZÁLEZ: ¿Se le puede leer?

GB: ¿Perdón? Que hable, y luego veremos si hay que leérselo.

T: Creo, creo no haber dicho eso. Yo he dicho que quedaban cajas fuera, que, ¿eh?, ni he dicho, ni al principio ni al final de la jornada. Estaban fuera. Yo las he visto fuera, en ocasiones, las he visto fuera.

00:04:09

D R. GONZÁLEZ: Y al final del día, ¿no?

T: Hombre, al final del día supongo que también, bueno, supongo.

D R. GONZÁLEZ: Esas cajas que quedaban, supone usted que al final del día, también, o al principio, ¿estaban cuando ustedes se iban a disposición de cualquier persona que llegara a la mina?

T: ¿Si estaban a disposición de cualquier persona? Sí.

D R. GONZÁLEZ: Sí. ¿Con los detonadores qué pasaba? ¿También, los sobrantes los podían dejar ustedes también ahí en el…?

T: En el tajo, sí, señor.

D R. GONZÁLEZ: En el tajo. Mire, ¿recuerda si existe una puerta de chapa metálica, y que ustedes en alguna ocasión han dejado explosivos detrás de ella?

T: Había en el segundo nivel una puerta de chapa metálica, pero yo jamás he dejado ningún explosivo ahí.

D R. GONZÁLEZ: ¿Estaba entre el primer nivel y el segundo?

T: Estaba en el segundo nivel.

D R. GONZÁLEZ: Y para, ¿y no se utilizaba, no se dejaba ahí detrás de la chapa, para que no le diera el sol o el agua, a la dinamita que sobraba?

T: La chapa esa en cuestión, estaba en el segundo nivel dentro del nivel. Si está dentro del nivel, no le puede dar el sol, ni el agua.

D R. GONZÁLEZ: Bien. En el segundo nivel, ¿cuántos mini-polvorines hay, había?

T: ¿En el segundo nivel?

D R. GONZÁLEZ: Sí.

T: Había uno, pero no estaba en funcionamiento.

D R. GONZÁLEZ: Había uno pero no se utilizaba, ¿no? Entonces, cuando se trabajaba en el segundo nivel y sobraba explosivo, ¿ése siempre se dejaba ahí en la bocamina?

T: Yo, sí. Yo, lo que hacían los demás, no lo sé.

D R. GONZÁLEZ: ¿Usted vio también unas etiquetas de Carrefour, ahí entre el primer nivel y el segundo nivel?

T: No sé, no las vi. He oído que alguien las había visto.

D R. GONZÁLEZ: ¿Qué es lo que oyó?

T:
Yo, verlo, no las vi.
T:
¿Cómo?

D R. GONZÁLEZ: ¿Qué es lo que oyó?

D R. GONZÁLEZ: ¿Qué es lo que oyó de esas etiquetas?

T: Que yo no las he visto, que he oído que las habían encontrado en la subida.

D R. GONZÁLEZ: Ajá. Bien, no hay más preguntas.

00:06:23

GB: ¿Alguna Acusación quiere hacer alguna pregunta? Ministerio Fiscal.

00:06:27

MF BAUTISTA: Con la venia, Ilustrísimo Señor. Sólo dos preguntas. Una, ¿ustedes firmaban vales de consumo, o no era lo habitual?

T: Yo, no. Había un señor que sí los firmaba. Porque era...

MF BAUTISTA: ¿Sólo conoce de este señor?

T: Que yo haya visto, sí. Lo había visto pedir…

MF BAUTISTA: ¿Es veraz? ¿Se descontaba efectivamente una cantidad proporcional a lo consumido? ¿O era simbólico? Digo en el sueldo.

T: No le puedo decir el tanto por ciento exacto de descuento, sé que a más metros de arranque, por regla de tres, había más gasto de dinamita, y por lo tanto, el descuento era mayor. A menos metros, el descuento era menor, pero vamos, no sé si correspondía o no, no sé cómo está el precio de la dinamita

MF BAUTISTA: ¿Alguno de ustedes, en la mina me refiero, a los trabajadores de la mina, usaba mono azul? ¿Lo recuerda usted? En general, ¿alguno usaba mono de trabajo?

T: Yo, en el tiempo que llevo yo, muy poca gente lo utilizaba, vamos, porque es inc…, para mí es incómodo. Yo lo he utilizado yo al principio, cuando empecé, en el año segundo, y tuve que dejarlo. No sabría decirle exactamente. Alguno, pero muy poca gente.

MF BAUTISTA: Pues, no hay más preguntas.

GB: Gracias. ¿Alguna Acusación más?

00:07:45

A GERIA: Sí, con la venia del Excelentísimo Señor Presidente. Por Angélica María Geria Cortés y su hijo menor de edad. Buenos días. Perdóneme, ¿el vigilante subía con ustedes a los mini-polvorines a vigilar lo que ustedes sacaban?

T: Pues no, no señor.

A GERIA: ¿El vigilante iba adonde ustedes habían dejado los restos de explosivo, a vigilar cuánto habían sacado, dejado, qué les había sobrado?

T: No, no señor.

A GERIA: ¿El vigilante entraba a la mina a saber cuánto combu…, explosivo ustedes habían utilizado diariamente?

T:
El señor vigilante entraba a la mina, pero vamos…
T:
No, no.

A GERIA: ¿Pero vigilaba cuánto utilizaban?

A GERIA: No hay más preguntas. Gracias, señoría.

GB: Gracias, ¿alguna más? Las Defensas.

00:08:37

D R. GONZÁLEZ: Con la venia, quería hacerle una pregunta más.

GB: Sí. A ver, no conteste hasta que yo se lo diga.

D R. GONZÁLEZ: Es que es sobre una pregunta que le he hecho antes, que no la encontraba, sobre la chapa metálica. Es que en su declaración dice que en el primer nivel se encontraba la dinamita tapada con una chapa metálica, para que no le diera el sol y el agua.

T: En el primer nivel, sí, y usted me habló del segundo nivel. Una chapa en el segundo nivel. Y yo le he dicho que la chapa del segundo nivel, la puerta, estaba dentro, y no le daba el aire, ni el sol, a la dinamita. En el primer nivel sí, había una chapa de dinami…, una chapa que cubría algunas veces cajas de dinamita.

D R. GONZÁLEZ: O sea, ¿había una chapa de esas en cada nivel?

T: No, no, en el primer nivel había una chapa, y se ponía encima de la dinamita, que no le diera el agua o el sol, la dinamita que podía quedar allí.

D R. GONZÁLEZ: Vale, no hay más preguntas.

GB: ¿Alguna más?

00:09:31

D LLANO: Sí, con la venia. La Defensa de Emilio Llano. Buenos días. Vamos a ver, usted dice que quedaban explosivos y detonadores en los tajos. Para vigilar si había quedado algo, había que entrar en el tajo, ¿no?

T: A ver, en... Yo he dicho, yo.

D LLANO: Sí, bueno, pero ¿habría que entrar en el tajo, para comprobar si había quedado algo?

T: Por supuesto, si no se entra, no se sabe.

D LLANO: Vamos a ver, ¿las explosiones se realizaban al final de la jornada?

T: Por supuesto.

D LLANO: Después de la explosión, ¿se podía entrar en los tajos?

T: No, no, señora.

D LLANO: No. ¿Finalizaba la jornada de todos, incluyendo la del vigilante?

T:
La mía sí, yo, la del vigilante, no sé hasta qué punto, me imagino que sí, claro, se iba con nosotros, claro, a su casa...
T:
Claro, claro.

D LLANO: Se iba con ustedes.

D LLANO: Nada más, muchas gracias.

GB: Gracias. ¿Alguna más? Ya se puede marchar. Se interrumpe la sesión durante…

Libertad Digital