Comunismo
El chavismo, eufórico con el "compañero" Pablo Iglesias: "Vamos a por España"
El líder de Podemos tiene su estrategia muy clara. Lenin no conquistó el poder gritando "comunismo, sino paz y paz", advierte.
La caída del Muro de Berlín, en imágenes
La oficina de turismo de Alemania en España ha organizado una más que interesante exposición sobre la caída del Muro de Berlín, de la que en este 2014 se cumplen 25 años. Se trata de una muestra que se puede ver en la Plaza Mayor de Madrid y que recoge 60 imágenes del fotógrafo Daniel Biskup tomadas en Berlín y otras ciudades alemanas en los meses entre la caída del Muro y la reunificación alemana.
El líder de los prorrusos, un nostálgico del comunismo soviético
El autoproclamado gobernador de Donetsk, Pavel Gubarev, quiere liberar a Ucrania de los "fascistas" aparte de abogar por una alianza con Rusia.
La feria revolucionaria
La Feria Proletaria
llega a Sevilla.
¡Con la hoz y el martillo,
la manzanilla!
Izquierda Unida añora el Gulag
El nazismo dejó tras de sí 20 millones de muertos y el comunismo 100 millones, lo que los coloca a ambos al margen de la civilización.
Clave en la caída del comunismo
El Papa polaco inspiró, junto a Thatcher y Reagan los cambios democráticos en los países del bloque soviético.
La masacre del Jueves Santo: el terrorismo comunista vuela la Catedral de Sofía
Se trata del atentado más grave del mundo en los años 20. Entre las víctimas había muchas mujeres y niños.
¿Propaganda nazi o comunista?
Los extremos se tocan. Refrán común para definir en una corta frase bibliotecas enteras sobre movimientos extremistas de uno y otro signo. Del holocausto nazi a la barbarie comunista. Dos factores identitarios que definen a estas ideologías que se cobijan en los extremos son, por un lado, la falta de respeto a cada individuo, como un fin en sí mismo. Por el otro, subestimar el noble valor de la libertad, virtud ensalzada por aquellos que les derrotaron. Ya que una imagen vale más que mil palabras, a continuación repasamos propaganda de uno y otro lado.
La maldita gracia del comunismo
No estaría mal que obligasen a todo aquel que se manifieste tras una bandera roja con una hoz y un martillo a leer un capítulo, sólo uno, de este libro.