Federico, en casa leemos tus libros (“La Dictadura Silenciosa” parece escrito ayer) y te escuchamos a diario en la COPE; para mi familia eres un referente moral por tu coraje y honestidad.La coherencia y el rigor intelectual de tus planteamientos, son un aliciente y una esperanza para soportar la bochornosa situación actual de la vida española.
Como muy bien lo has definido, estamos en el invierno mediático, pero la esperanza que difundes a diario, es el mejor argumento para esperar que no conseguirán sus propósitos.
¡Ánimo Federico, somos millones de personas las que sentimos y pensamos contigo!
Un abrazo muy fuerte.