La apuesta de nuestra clase política por Europa como proyecto político forma parte del envilecimiento de la ideología ilustrada que despreciaba la idea de nación buscando desintregrarla (solve) en unidades menores para reconstruirla (coagula) en su utpópica "humanidad" tal fue el sueño de los ilustrados, de los jacobinos y de los bolcheviques y ahora también de la clase política "progresista" española. Este derrotismo a priori no es nuevo. El principal enemigo de España durante la ocupación musulmana no eran los árabes ni los bereberes sino los muladíes, es decir los hispanos que creían ideológicamente en la Umma como proyecto político y durante la ocupación francesa el principal enemigo eran los ilustrados españoles para los cuales el proyecto napoleónico representaba el triunfo del Estado Hegemónico Universal que tenía que "liberar" a la humnidad. La situación hoy es muchísimo peor porque esos "ilustrados" controlan los medios de comunicación, la universidad y la enseñanza, la banca y la representación política. El mal de España es que se considera más peligroso lo que se llama fascismo que el hecho de que nuestra clase política haya enajenado alegremente nuestra soberanía. El caso de Izquierda Unida es especialmente patético porque como ideológicamente participa del odio a la nación ha ayudado al PSOE en su proceso de rendición ante la Unión Europea y nuestra conversión en un protectorado y ahora que se produce un conflicto entre los intereses internacionales partidarios del proyecto político europeo y los intereses sociales, de trabajadores pero tambien de empresarios españoles, el Estado carece de capacidad para oponerse a las exigencias del Bruselas y todo ello por esa tontería de querer poder decir eso de "semos uropeos." En fin dicen que la sarna con gusto no pica.
Recuerdo la época en la que España no destacaba nada en el deporte, ni en los oscar, ni en nada. De la noche a la mañana surgió la brillantez del páramo. ¿No habremos detener nuestra Tatcher, nuestra Isabel la Católica del siglo XXI? ¿Dónde coño anda?¿Dónde se esconde? A veces la valentía de uno solo lo cambia todo.
Como tantas veces, el señor Moa tiene razon.Desgraciadamente, la derecha que tenemos muestra una cobardia suicida tal que mucho me temo que el proceso es ya imparable y que el señor Rajoy, auxiliado por la inepta señora Camacho, no haran mas que mirar hacia otro lado mientras nos encaminamos al abismo de la secesion.
Totalmente de acuerdo con el artículo de Don Pío. Como bien dice, muy poca gente dejará de comprar productos catalanes cuando esta región se independice y, en todo caso, ese pequeño boicot desaparecerá pronto. No conozco a nadie que no compre productos argentinos o portugueses por el hecho de que estos países en su día se independizaron de España. En cuanto a la UE, Francia (que es quien realmente manda en la UE junto a Alemania) presionaría para que Cataluña entrara en este organismo, puesto que una Cataluña independiente pasaría a la órbita económica francesa.
Por otro lado, el efecto contagio sobre otras regiones (Vascongadas, Galicia, Canarias...) sería inmediato. Y para colmo, al día siguiente de independizarse Cataluña, el nuevo estado presentaría reivindicaciones territoriales sobre Valencia, Baleares y parte de Aragón. No hay que olvidar que, según los nacionalistas catalanes, los "países catalanes" van desde Fraga (Aragón) a Maó (Baleares).
Yo discrepo completamente de la tesis del señor Moa, y me pregunto como, a partir del estado actual se podría llegar a una situación en la que el lugar del nacimiento en un territorio conlleve prebendas sobre los nacidos en otros, o ¿es que el sr. Moa acepta el status quo actual, en que para impedir la igualdad se hayan puesto en marcha leyes, lenguas, poder mediático y económico, adquirido por algunos territorios merced a su capacidad de compra de los corruptos o cerdos que han dirigido este conato de estado.
Creo, que solo la independencia de Cataluña y del mundo Vasco, puede salvar a España del estado gangrenoso en el que está, desde hace bastante tiempo. Solo se podría aceptar a esos dos territorios, si, y solo si, sus habitantes aceptasen tener los mismo derechos y deberes que el resto de los españoles, lo que, en este momento, veo difícil si no imposible. Si la curación es imposible, solo se puede optar por la amputación de los miembros insalvables. Soy consciente de la problemática que habría con las Baleares, Valencia, Galicia y Navarra, por razones diversas, pero cada día que pase en este estado de suciedad y estupidez, esa problemática crece: los planes de adoctrinamiento siguen adelante pagados por todos: esas regiones acentuarán su antiespañolidad en vista de los dividendos que produce, fenómeno que también se desarrollaría en otras como Canarias, Andalucía, Cantabría, Asturias o incluso Extremadura, está ultima con su Gabriel y Galán y su Portugal, solo tendría que hacer bandera del desmoche de sus torres efectuado por Isabel I.
Creo que empresas como Bayer, Lidl, por poner un par de ejemplos, no tendrían otra opción que trasladarse a algún punto que siguiera siendo Español para poder seguir con su negocio, ya que, aunque, Cataluña y Vasconia hubieran de ser admitidas en una Europa que no se sabe si existirá ni lo que será, el intervalo para que eso ocurriera sería, como mínimo de diez años, intervalo en el que, con algo de inteligencia e imaginación, practicamente todo el potencial productivo de esas dos regiones habría gravitado hacia el núcleo mayor español: vg. forzando a los médicos de la SS a recetar medicamentos nacionales. Solo habría que imitar la hipocresía de las actuaciones que esos nacionalistas llevan practicando tanto tiempo.
No es que sea un paisaje muy estético, pero la situación actual es mucho más fea, es repugnante, absurda, sucia, impresentable en el Mundo, y además, esa infame estética no hará sino acentuarse cada día que pasa. Naturalmente esa medidas haría necesarias otras otras regenerativas en la sociedad española: guerra a muerte a la corrupción, a la ineficacia, a la ineficiencia, al parasitismo, a la holgazanería, y a todos esos valores que parece estar incrustados en el alma colectiva española, al menos desde Felipe II, o están desde Enrique el matador de don Pedro?, o ¿es desde don Julian? o desde Viriato?
Redundanto, sr. Moa, usted y los que le apoyan con sus comentarios no proponen soluciones posibles o viables. ¿Están por seguir con las asimetrías de flujos y por la perpetuación de las relaciones amos-esclavos de este condominio vasco-catalán teledirigiendo al zp al rubalcaga apoltronado en Madrid?
pedromar:
Se olvida usted del PER en Andalucía. Esto levanta ampollas en todas partes y promueve lo mismo que el cupo vasco. En esto la Revolución Francesa lo hizo bién: Igualdad de derechos y obligaciones, nada de derechos históricos, eso significa la esclavitud!!
"El nacionalismo significa la guerra" ( F. Miterrand)
Un saludo
Este análisis es impecable, los que vivimos aquí ( Cataluña) lo vemos de antología. Y nos hacemos cruces pensando en la desgracia que tenemos de que los hechos vayan por estos derroteros. No puede ser que seamos tan burros, y que nos hagamos el harakiri de este modo. Pero viendo lo que hacen los políticos y las instituciones con temas como Vascongadas...ALARMA!!!! AL ARMA!!! O sucumbiremos. Un cordial saludo D. Pío.
Lucidez en estado puro es este magistral artículo. En pocas líneas está todo más que claro.
No es que los secesionistas sean muy listos: es que los responsables de los partidos digamos nacionales, son inmensamente tontos...
Ay, Sr. Moa por fin lucidez. ¿Nadie se da cuenta de a dónde vamos?
La apuesta de nuestra clase política por Europa como proyecto político forma parte del envilecimiento de la ideología ilustrada que despreciaba la idea de nación buscando desintregrarla (solve) en unidades menores para reconstruirla (coagula) en su utpópica "humanidad" tal fue el sueño de los ilustrados, de los jacobinos y de los bolcheviques y ahora también de la clase política "progresista" española. Este derrotismo a priori no es nuevo. El principal enemigo de España durante la ocupación musulmana no eran los árabes ni los bereberes sino los muladíes, es decir los hispanos que creían ideológicamente en la Umma como proyecto político y durante la ocupación francesa el principal enemigo eran los ilustrados españoles para los cuales el proyecto napoleónico representaba el triunfo del Estado Hegemónico Universal que tenía que "liberar" a la humnidad. La situación hoy es muchísimo peor porque esos "ilustrados" controlan los medios de comunicación, la universidad y la enseñanza, la banca y la representación política. El mal de España es que se considera más peligroso lo que se llama fascismo que el hecho de que nuestra clase política haya enajenado alegremente nuestra soberanía. El caso de Izquierda Unida es especialmente patético porque como ideológicamente participa del odio a la nación ha ayudado al PSOE en su proceso de rendición ante la Unión Europea y nuestra conversión en un protectorado y ahora que se produce un conflicto entre los intereses internacionales partidarios del proyecto político europeo y los intereses sociales, de trabajadores pero tambien de empresarios españoles, el Estado carece de capacidad para oponerse a las exigencias del Bruselas y todo ello por esa tontería de querer poder decir eso de "semos uropeos." En fin dicen que la sarna con gusto no pica.