Filipinas

El responsable de las Fuerzas Armadas de Filipinas, Hermogenes Esperon, ha anunciado que el jefe de la organización terrorista islámica Abu Sayyaf, Jadafi Janjalani, está muerto. Esperon ha señalado que los análisis efectuados en Estados Unidos confirman que el cadáver desenterrado en la isla de Joló, a unos 980 kilómetros al sur de Manila, pertenece a Jadafi. El terrorista jefe de Abu Sayyaf falleció el 4 de septiembre de 2006 en un combate contra el Ejército en la jungla de Patikul. La desaparición de Jadafi crea un vació en esta organización terrorista vinculada a Al Qaeda. De los cinco miembros de la cúpula del grupo que había en 2001 tras los atentados del 11-S, ya sólo queda vivo Isnilon Hapilon.

El Ejército filipino teme que el grupo terrorista del Abú Sayyaf lance una ola de atentados después de que fuera confirmada la muerte de uno de sus máximos líderes, Abú Solaiman, en un combate con soldados. El terrorista está involucrado en el secuestro y asesinato de dos turistas estadounidenses. Unidades militares adicionales han sido movilizadas a la isla de Joló, donde se lleva a cabo una ofensiva militar.

La Cruz Roja de Filipinas ha informado que al menos cuatrocientas personas han muerto en el archipiélago filipino por el paso del tifón "Durian" con vientos de más de 150 kilómetros por hora y que ha producido intensas precipitaciones. El número de damnificados asciende a 21.684 personas en nueve de las provincias afectadas.

El hispano filipino Francisco Larrañaga, hijo del ex pelotari vasco Manuel Larrañaga y de la filipina Margarita González, acaba de salir del corredor de la muerte de una cárcel de Manila, después de que en junio pasado se aboliera la pena capital en Filipinas. Larrañaga fue condenado a muerte en apelación junto con otros cinco jóvenes filipinos por el secuestro, violación y asesinato de las hermanas Marijoy y Jacqueline Chiang, ocurrido en la ciudad de Cebú (centro del archipiélago) en 1997. Tanto sus abogados, como su familia y numerosas organizaciones han denunciado que el juicio en el que se le condenó estuvo plagado de "irregularidades".

Doce personas han muerto y otras cuarenta permanecen heridas por la explosión de una potente bomba que estalló en plena fiesta popular en la plaza del pueblo de Makilala, en la sureña isla de Mindanao. Las fuerzas de seguridad y el Ejército filipino permanecen en alerta ante la posibilidad de que se registren más atentados y después de que expertos artificieros encontraran en una bolsa dos morteros de 81 milímetros con un teléfono móvil y una pila de nueve voltios. Horas antes, en el pueblo de Tacurong se registró otra explosión que hirió a cinco personas. Las autoridades locales han responsabilizado a miembros del grupo terrorista de la Yemaah Islamiya. Los gobiernos de EEUU y Australia ya habían advertido del riesgo de ataques en la región.

La Policía regional de la isla de Mindanao, al sur de Filipinas, se encuentra en alerta máxima ante informes creíbles que apuntan a un eventual atentado terrorista contra instalaciones de Gobierno y áreas públicas por parte de terroristas de la Yemaah Islamiya y del Abú Sayyaf. Según los informes de inteligencia, los ataques están siendo organizados por los indonesios Dulmatin y Umar Patek.

Veinte terroristas del grupo Abú Sayyaf y seis soldados del Ejército filipino han muerto en los enfrentamientos registrados en la isla de Joló, al sur del archipiélago. El mando militar comentó que se enfrenta a cerca de doscientos combatientes que protegen al jefe de la organización, Jadafi Janjalani, y a dos de los terroristas más buscados del sudeste asiático, los indonesios Dulmatin y Umar Patek.

Gloria Macapagal Arroyo, presidenta de Filipinas, firmó este sábado en Manila la ley que suprime la pena capital en el país, lo que permitirá la salida del "corredor de la muerte" al reo hispano-filipino Francisco Larrañaga. Arroyo, quien rubricó el documento en el Palacio de Malacañang poco después de salir del hospital, donde estuvo ingresada desde el jueves aquejada de problemas intestinales, manifestó que la firma "marca el fin de una era de justicia vengativa". "Celebramos la vida del modo más significativo, reuniendo a nuestras instituciones para rechazar la pena de muerte", declaró la mandataria.

El Congreso filipino aprobó esta noche una ley que abole la pena de muerte en el país, un día después de que las dos cámaras que lo forman adoptaran sendos proyectos de ley para eliminar este castigo. La aprobación de la ley por la que se elimina la pena de muerte tuvo lugar en un comité conjunto del Senado y de la Cámara de Representantes, que unificó en un texto único los dos proyectos de ley, informó a Efe el portavoz de la cámara baja, Noel Albano.