¿Gremio de pedigüeños? Si antes lo era, seguro que ahora dejará de serlo. ¿Cuántos miles de millones dedicará la señora Ministra de Cultura para que hagan películas donde hasta los cámaras salgan en pelotas? Porque al cine español, salvo meritorias excepciones que confirman la regla, les quitas el destape y solo quedan las subvenciones, porque son tan taquilleras que donde las proyectan se llena de telarañas.