Como ocurriera a finales de la pasada legislatura y, sobre todo, el 13 de marzo de 2004, el PP está siendo blanco de ataques, insultos y agresiones. Sólo en Madrid la violencia anti PP ha dejado su rastro en San Agustín de Guadalix, Móstoles, Pinto y Alcorcón. Alberto Ruiz Gallardón y Ana Botella fueron insultados por una vocal de distrito del PSOE que les llamó asesinos. "Recuérdale a tu marido los muertos de Santa Eugenia", le espetó a la concejala culpando a Aznar del 11-M. En el País Vasco, dos concejalas fueron agredidas e insultadas mientras pegaban carteles electorales. El PSOE guarda silencio y sigue sosteniendo que sólo crispa el partido de la oposición. El último ejemplo, y en el peor estilo lo ha ofrecido el ministro Bermejo mezclando insultos, graves acusaciones y falta de respeto a la Justicia
VÍDEO EN EL INTERIOR: Destrozos en una sede del PP.

Lo que un día es una prueba clara, veinticuatro horas después ya no lo sea. Este lunes, ni Fiscalía ni PSOE ven ya motivos de ilegalización en que el brazo político de ETA haya pedido el voto para ANV. Pese a que el domingo, horas antes de la solicitud de voto etarra para su franquicia electoral, Pumpido había afirmado en los medios de Prisa que este hecho podría dar inicio a una ilegalización o suspensión judicial. La Fiscalía se queda en que "vigila", el PSOE en que "no procede". Pese a todo, Rajoy llevará este asombroso cambio de pareceres al pleno de este miércoles en el Congreso. Mayor Oreja no tiene dudas: "El fiscal es parte fundamental de la negociación con ETA".

La CEP acusa a Pumpido de "dejación de funciones"
La "parte fundamental" de la negociación

El PSOE estrenó su campaña electoral con un vídeo en el que recurre por enésima vez a la retirada de las tropas de Irak. Son ya tres los años que lleva Zapatero presumiendo de su hazaña. Tanto es así que hasta el líder de IU, Gaspar Llamazares dijo este lunes que no puede "vivir eternamente de las rentas" de la retirada de Irak, y dijo que para pedir el voto "de izquierdas" hay que retirar también las tropas de Afganistán y "solidarizarse" con el Sáhara y Palestina. Además, Llamazares se dedicó este lunes a hacer ingeniosas comparaciones con Rajoy: por la mañana dijo que era como Le Pen y por la tarde como Ratzinger.