Objetivo cumplido, aunque con matices, para la selección inglesa. Ya están en octavos de final, pero la imagen que han ofrecido este jueves dista mucho de la esperada de una favorita para alzarse con el título de campeona. No estuvo nada inspirada durante el encuentro y se estrelló una y otra vez contra el muro de Trinidad y Tobago, que a punto estuvo de darle un disgusto. En la recta final del encuentro, David Beckham asistió a Crouch para quitarle el nudo de la garganta a Eriksson y Gerrard hizo el segundo con un extraordinario disparo desde fuera del área. La buena noticia para los ingleses fue la reaparición de Rooney después de su lesión, aunque fue notoria su falta de ritmo.
- Así les hemos narrado el Inglaterra-Trinidad y Tobago