La Casa Blanca aseguró este martes que no abrirá conversaciones sobre un posible reactor nuclear de uso civil para Corea del Norte hasta que ese país no se haya deshecho de su programa atómico de manera verificable. Pyongyang se comprometió este pasado lunes en Pekín a
renunciar a su programa atómico y a volver lo antes posible al Tratado de No Proliferación nuclear (TNP) a cambio de que se considere su derecho a usar energía nuclear con fines pacíficos. Pero solamente
24 horas después, las autoridades norcoreanas han roto este compromiso.