Tras la misa del Domingo de Resurrección, celebrada por el cardenal Angelo Sodano, el Papa se ha asomado a la ventana para impartir la bendición “Urbi et Orbi”. El Pontífice ha presentado signos de cansancio, lo que no le ha impedido bendecir a la multitud congregada ante la basílica de San Pedro. Aunque tenía un micrófono, no se ha podido escuchar la voz de Juan Pablo II, debido a la traqueotomía que se le practicó en febrero, y se ha limitado a bendecir a los fieles con la mano derecha.

El soberano monegasco está "consciente pero sedado" y si bien se han "estabilizado" sus funciones cardíaca, pulmonar y renal, su pronóstico vital se mantiene "muy reservado" y su estado sigue siendo "preocupante", según un parte médico divulgado este domingo por su gabinete. Este sábado, los facultativos calificaron de "extremadamente reservado" el pronóstico del decano de los soberanos de Europa, lo que disparó los temores más alarmistas entre los monegascos sobre la inminencia de un desenlace fatal.

El retorno a las ciudades tras las vacaciones de Semana Santa comenzó a primeras horas de la tarde de este domingo a salpicar de retenciones de coches las carreteras españolas, especialmente en las vías que se dirigen a Madrid. Según la DGT, había más de doscientos kilómetros de atascos. El principal problema se registraba en la A-6 (carretera de La Coruña), con al menos 49 kilómetros de circulación lenta con paradas intermitentes entre la provincia de Segovia y los túneles de Guadarrama, casi hasta Villalba.