Hacienda pretende crear grupos específicos de inspectores que se dedicarán a comprobar qué viviendas están vacías con la
excusa de localizar arrendamientos no declarados. También se dedicarán a comprobar si el titular que se está desgravando por primera vivienda vive efectivamente en ella o está mintiendo. Como herramientas de apoyo, se diseñará un método informatizado y
se creará una base datos en colaboración con los arquitectos.