de Ciudadano español
Sr. Recarte, uno de los comentarios que he leido sobre sus artículos es : "por qué el sr Recarte no es político" con lo bien que explica
las necesidades del pais.
Hagase político Sr. Recarte y ayudenos a salir de este gran atolladero económico en el que nos encontramos los españoles.
de mjc
No tengo claro que sea bueno que el cuerpo de interventores dependa del Congreso de los Diputados. Prefiero que sean independientes de los partidos políticos. Ya gozamos de demasiada partitocracia oligarquica ¿no?
de Rafael Pérez
Ma parece excesivo el predominio de las medidas políticas, económicas y legislativas. Nos olvidamos que la economía real debe mejorar en todos los sectores. ¿Que pasa con la agricultura?: precios bajos y ruína de los agricultores por las importaciones excesivas de productos del tercer mundo. ¿Y la industria?: deslocalización, cierres y falta de competitividad, también excesiva legislación y trabas. ¿El turismo?: a su aire, sin ningún apoyo ni plan estatal de la mayor industria del país. Resto de sectores productivos en igual abandono del estado.
El sector de sevicios que dice el usted que representa el 70% de nuestra economía, más bién es un parásito de los sectores productivos básicos, que ha sido pontenciado en nuestro país por el aumento sin par de los organismos reguladores y su burocracia sin fin.
Es decir, hay que relanzar la economía productiva de base, si no, no hay nada que hacer. Menos servicios y más apoyo al la economía que genera la riqueza.
de aversiahora
¡Ya! Y si mi abuela tuviera ruedas, sería una bicicleta.
¿Qué tal este escenario? Aproximadamente el 20% (200.000 millones) del PIB no existe: era "dinerito fresco para gastar" que antes nos prestaban los mercados y que ahora nos presta el BCE. Ahora nos dicen que, como mucho, nos prestarán 30.000 millones en 2013. Hay que recortar, por tanto 170.000 millones, más otros 100.000 de vencimientos de deuda (pública + privada). En total, cerca del 25% del PIB.
Podemos decir que la inflación está en el 3% cuando probablemente esté en el 7% y engañarnos, por tanto, con que el PIB real crece un 1%, cuando decrece un 3% (¡yo también me digo todos los días que hoy Jessica Biel va a venir a visitarme!).
La realidad es que tarde o temprano tendremos que vivir con unos 750.000 millones de PIB, lo cual nos devuelve a -escribo de memoria- 2004. No es tan grave, siempre y cuando se acepte por la mayoría de la sociedad. ¡Cierto es que ahora somos 46 millones! ¡Bueno! Entonces, en PIB/cápita serían unos 16.000 €, lo cual nos envía a -sigo de memoria- 2000. Sigue sin ser tan grave.
Este es el escenario navideño (o recartiano). Ahora vamos al real (o centenero): además de todo lo anterior, la banca está absolutamente quebrada. Esos 200.000 millones que dicen por ahí para capitalizar el sistema financiero europeo, no dan ni para cubrir la tercera parte del español. Aceptemos pulpo como animal de compañía y tiremos por lo bajo: un mínimo de 200.000 millones de mora; un mínimo de 500.000 millones de crédito "al ladrillo"; una quita de deuda soberana del 30%, es decir, 150.000 millones; un impago de créditos al sector público de, tranquilamente, 50.000 millones...
Señores: vayan preparándose para un recorte de salarios, pensiones, sanidad y educación del 30% y para el corralito para sus depósitos bancarios, de los que recuperarán... no sé... ¿la mitad?... dentro de 5 años.
Resumiendo: en el mejor de los casos, prepárense para volver a 2000; y en el peor, prepárense para volver a 1980. Repito: no es tan grave. en 1980 de vivía, se estudiaba, se iba al médico, se viajaba...
Vean otra vez Verano Azul: es de esa época. Para que sepan lo que viene. No es tan grave.
de aversiahora
¡Ya! Y si mi abuela tuviera ruedas, sería una bicicleta.
¿Qué tal este escenario? Aproximadamente el 20% (200.000 millones) del PIB no existe: era "dinerito fresco para gastar" que antes nos prestaban los mercados y que ahora nos presta el BCE. Ahora nos dicen que, como mucho, nos prestarán 30.000 millones. Hay que recortar, por tanto 170.000 millones, más otros 100.000 de vencimientos de deuda (pública + privada). En total, cerca del 25% del PIB.
Podemos decir
de JUAN FELIX ORTIGOSA
Señores :
Lo que urge es una regeneración nacional en toda regla y políticos con espíritu de servicio a España y no a su carrera personal.
¿Que hacen el Sr. Recarte, el Sr. Jiménez los Santos , y tantos otros
fuera de la política?, ¿No se dan cuetna que España los necesita ?.
de Alvaro Zárate
Excelente, el Informe.
Ojalá lo estudien despacio en el Despacho de Rajoy.
Hay temas que no suelen aparecer nunca.
ENHORABUENA!
de Fco Javier - Tenerife
La verdad, el señor Recarte acierta de plano con el diagnóstico de los problemas de la administración, que nos lo cuenten a los sufridos ciudadanos, con el "metometodo" cabildo insular y el "todopoderoso" gobierno autónomo. DA IGUAL EL COLOR POLITICO. Si no como creen que Curbelo ha llegado a donde a llegado. Con una sociedad "narcotizada" por subvenciones, convenios de empleo y etc...
de Cidadano de España
Sr. Recarte, reconozco sus razonamientos sobre la diversidad y duplicidad de competencias en todos los asuntos de los ciudadanos,la diferencia económica y de bienestar entre las distintas comunidades españolas, y como bien cita, creo que gran parte del problema radica en las diversas interpretaciones que las "Autoridades Competentes" se permiten hacer de la CONSTITUCIÓN.
La Constitución debería reformarse de forma que no hubiera lugar a distintas interpretaciones de la misma, de forma que las leyes puedan cumplirse con rigor,equidad y justicia, pese a quien pese, guste ó no.
de Alvaro GG - Mallorca
La única alternativa para la conservación de las administraciones autonómicas y/ diputaciones es desposeerlas constitucionalmente de su condición de comunidad político – representativa, esto es: que dejen de ser autonomías: ¡derogar eso de “nacionalidades y regiones”, el Título VIII de la CE, todos los Estatutos y dejar que sea el derecho administrativo general quien ordene la organización territorial sin hipotecas constituyentes!; Acabar con la constitucionalización de las manías y demás neurosis nacionalistas y evitar a toda costa la imposición de una servidumbre socio-cultural de éstos sobre la población es un imperativo que los partidos nacionales no están por la labor de cumplir. Así en las autonomías – autonosuyas que diría Don Fernando (rip) – los métodos políticos y los artificios ideológicos son más propia de la organización tribal que de la organización burocrática para dar soporte a la actividad productiva y la provisión de los bienes y servicios públicos que sostienen el sector privado; es una ficción metafísica que las autonomías sirvan a sus pobladores, si bien está claro que sirven al aparataje e instrumental político y sus periferias. Esto es, las autonomías sirven para implementar unas estrategias que favorables a las elites políticas y sus amos y clientes, sean capaces de crear una “sociedad de acceso limitado”, deviniendo la comunidad social en una etnia burocrática y su organización en una jerarquía de castas. Por ello no pienso que las disfunciones económicas y sociales, incluso sociológicas y aún psicológicas, que genera el sistema autonómico provengan del derecho público, ya constitucional ya administrativo, aunque la configuración del derecho público y del sistema judicial haga imposible la defensa y resistencia jurídica de la ciudadanía o de la “sociedad civil” frente a los abusos de la “España oficial”, y precisamente abogo por cargarnos la constitucionalización y/o legalidad orgánica del reparto del poder territorial. Tal es así que es la corrupción troncal es el método de subsistencia política y de realización de la ambición consiguiente, el clientelismo y la especulación populista de los artificios ideológicos sus manos, que por otro lado se imponen y se socialización gracias a que hemos sido tan necios de asignarle a la casta política el control total del sistema educativo, de los medios de comunicación o incluso les permitimos determinar qué lengua tenemos que hablar, … en fin …: nada ha sido más fatal para el modelo autonómico como el funcionamiento perverso de los partidos, la inmadurez política de la sociedad, la profesionalización jerárquica de la representación política, y sobre todo las concesiones a los nacionalistas, cuyo caballo de Troya está en el sistema electoral y la actitud servil de los grandes partidos. Por otro lado de nada nos sirve el derecho comparado; nadie – y menos aún los políticos españoles, ya no hablemos de los contra-españoles – escarmientan en cabeza ajena, y el proverbial paletismo contrastivo e internacional del político y votante medio lo empeora el asunto más cabe: no es que el español medio no conozca el Orbe, sino es que no conoce España; además el burdo corta y pega de la Ley Fundamental de Bonn nos ha dejado el sector público y el derecho público hecho unos zorros. Pensemos en la mentalidad de la sociedad, partidos y opinión pública en otros Estados federales (Hungría, Austria, Alemania, Australia, Brasil o Méjico, por ejemplo) nada tiene que ver con la realidad española, y en éstos la corrupción y el desfase de las ambiciones de poder y de los artificios ideológicos a imponer a la sociedad desde la cúspide política y financiera pueden estar presentes, pero a fin de cuentas las fuerzas centrífugas están compensadas por las centrípetas; ¡aquí no!, aquí pasamos del derrape al resbalón sin estabilizar el cuerpo institucional, por usar terminología física; la deslealtad institucional es por tanto el principal problema de fondo, y su omnipresencia entre las filiales regionales y los partidos nacionalistas hace que cualquier sistema legal autonómico concebible vaya a ser subvertido por la parasitación orgánica, generando nuevamente – a la mínima oportunidad económica o recaudatoria – una homeostática gigántica y atrófica, una metástasis fatal del tejido del sector público no tanto por su fisiología como por su psicología. Así no ha sido la indeseable realidad la que ha abierto los ojos de la opinión pública “masiva” respecto de este problema, no ha sido la injusticia de los cupos y conciertos vasco o navarro, o la contumaz ruina del sur, ni la corrupción motorizada, ni la inmoralidad y mediocridad subyacente en las castas representativas … lo que ha abierto los ojos de muchos, sino la crisis; hasta que no nos hemos visto en el paro, en la depresión, en la ruina, en el default … prácticamente nadie ha entendido las consecuencias del sistema territorial que nos han impuesto unas minorías opíparas y miserables, sino directamente criminales, usando demasiadas veces métodos ostensiblemente criminales. Hemos tenido que quebrar para que muchos se den cuenta de que efectivamente la organización dada conducía inexorablemente a la quiebra. Por ello convertir las entidades territoriales distintas del Estado en administraciones meramente burocráticas, funcionales – funcionariales –, sin Parlamentos, sin órganos o institucionales redundantes a las estatales, sin enchufados, y sin duplicidades, desposeerlas de su potestad legislativa y presupuestaria y obviamente dejar en manos de entes estatales los servicios y bienes públicos esenciales (educación, sanidad, pensiones, trabajo, justicia, infraestructura, mercados regulados, función pública, sistema presupuestario, financiero y tributario y obviamente exteriores, FCSE y políticas de seguridad e interior …) es una necesidad que ningún partido va a tener la honestidad siquiera de plantear.
Es por tanto una cuestión ética, cultural o incluso psicológica, intelectual, que no jurídica, y si antes no se rectifica esa cultura tribal, el terruñismo y la vocación subyacente al nacionalismo, al regionalismo y demás meapilismos de similar jaez, no hay nada que hacer, aunque traduzcamos palabra por palabra el sistema administrativo alemán y lo implantemos un viernes por la tarde.
de ALEXIS
Estoy de acuerdo con usted en este magnifico tercer informe que ha elaborado. ya escribí en un mensaje anterior, aunque no tan espléndidamente como usted de que la Administración Pública Española es un despropósito. De facto parecemos si me permiten la expresión " Una Monarquía Parlamentaria Federal" que se llama Reino de España. Compuesta por 17 " estados más pequeños ".Es cierto y con toda razón me lo parece, cuándo se utiliza el término " balcanización " de España acuñado por un historiador "polémico" esta más que justificado porque de facto es lo que es. No es ninguna exageración. Ese es a mi juicio el gran problema de España, que tenemos una Constitución de consenso como la de 1876 que junto con la actual son las que más han durado en España. ¿Y a que es debido ese milagro? pues que era y es poco definitoria en asuntos relevantes permitiendo diferentes interpretaciones.Y en los asuntos peliagudos ahí esta el TC órgano relevante dónde los haya para dirimir las cuestiones suscitadas. Aunque sus sentencias dejen a más de uno "asombrado" por lo artificiosas que nos puedan parecer y flexibles interpretaciones, parecen que tienen más de doctrina política que jurídica aunque nos las presente con el disfraz de esta última. Gracias y un saludo a todos los lectores de LD.
de Álvaro García Gutiérrez - Mallora
La situación del sector financiero impide abordar una estrategia de producción en áreas más competitivas de la economía española para incrementar las exportaciones y reequilibrar la balanza comercial, compensando así la tasa de paro y mermando el déficit por cuenta corriente. Las entidades de crédito quieren llevarse una tajada demasiado grande de los réditos de los exportadores; los tipos de interés en ventanilla son usurarios y es que no hay negocio que dé un rendimiento siquiera capaz de afrontar los intereses que demandan las entidades. Los precios españoles no son competitivos para abordar estrategias de producción para la exportación, y quien está en condiciones de hacerlo deslocaliza y/o emigra – si es profesional –. A ello hay que sumarle la pesada losa burocrática y tributaria que oprime cualquier actividad productiva. La combinación de tales circunstancias – tributarias, burocráticas y bancarias – hace que sea inútil siquiera plantear la posibilidad de producir algo exportable. ¿A qué precios?, ¿y a qué tipos?, ¿y a costa de exponerme a qué tipo de sanciones y abusos administrativos y bancarios por flanquear los insalvables obstáculos de la actividad?. Y si he de arriesgar mi patrimonio, ¿qué supersticiosa y política argumentación – engaño – puede alegarse para disuadirme de que lo haga en otro país con tipos impositivos, burocracia y bancos menos estultos y miserables, menos usurarios e incompetentes?. Por ello, sin “banco malo” y por ello sin aflorar las pérdidas de las entidades bancarias, sin una depuración inmisericorde enchufados, sin una elevación de tipos capaz de incrementar el ahorro nacional y que sea capaz de reducir al medio plazo los tipos de interés de ventanilla, sin una readecuación monetaria de los tipos de interés y de cambio a los que realmente debería soportar la economía española, sin una reforma del sistema de financiación de la seguridad social y sin una depuración histórica de las mafias inamovibles que componen esos criminales con corbatas de seda, ya podemos ser los jóvenes españoles auténticos cracks mundiales – como demuestran nuestros deportistas – que los intereses y las vergüenzas de las elites no nos dejan más alternativa que la emigración, y a los empresarios no les queda más remedio que la deslocalización. Así en términos de historia natural estamos ante una anomalía antropológica, e incluso puede que biológica; me explico: si las especies que sobreviven a las extinciones masivas son las que más flexibilidad demuestran para el cambio, las que son capaces de hacer de la necesidad virtud, en España tenemos unos sindicatos que viven en el siglo XIX, un funcionariado y una clase política que cree vivir en plena burbuja crediticia, sino es que viven en los años treinta esforzándose porque cuanta más gente mejor viva con ellos en esa realidad virtual, tenemos unas entidades de crédito que vive en Babilonia, sino parecen extraídos, ellos y su ordenamiento hipotecario del Mercader de Venecia, de Shakespeare, … y una mentalidad ideológica que fomenta que la sociedad crea que la metafísica política a fuerza de votaciones y oclocracias es capaz de enmendar la realidad, lo bueno y lo malo, lo correcto y lo incorrecto, lo rentable y lo ruinoso. En definitiva, que es natural que en este “hábitat” económico, legal y financiero, las especies que vayan a sobrevivir a la mayor estafa continuada a los contribuyentes españoles por parte de sus autoridades y banqueros desde el S.XVII, sea o bien la deslocalización o bien la emigración. Así Querido y Admirado Sr. Recarte, lo único que exportará España con éxito es a los mejores, agravando más si cabe la crisis.
de Jose Sanchez
Es notorio el analisis global realizado por D. Aberto. Como se pòdria decir "chapó".
Necesitamos exportar, lo que el resto de paises nos demanden con necesidad. Por tanto hemos de procurar que las zonas mas productivas de los bienes demasndados no les falte ni el agua adecuada y suficiente, así como el I+D, necesario en sus morfologia y en la logistica de suministro y trasporte. Lease Trasvase del Ebro a zonas mas meridionales y el "Sistema de comunicaciones Arco del Mediterraneo"......
de Bob
Me sumo a los que quieren ver el informe completo. Me gustaría tener la posibilidad de enviarlo por e-mail CCO a mís amistades. Les encantará. en general estoy de acuerdo con el Sr.Recarte, sin embargo es cierto que en España a día de hoy hay que tener cuidado cuando hablamos de limitar a los agentes sociales. Aún estamos en el paleolítico de las relaciones laborales. ¿Cómo lo vamos a resolver, no lo sé? Tarea para casa. ¿Qué debemos hacer para que España funcione sin Políticos ni Banqueros? O sea sólo con Inversores y Productores.
de C.D.A.
Sr. Recarte:
En el planteaiento del problema, veo que hace usted incapié en la injerencia de los partidos politicos en las tomas de decisión del TC. También resalta usted ( en varias ocasiones ) el problema derivado del actual sistema de convenios colectivos, llegando a decir que deberian desaparecer los sindicatos actuales. Con respecto a la despolitización del TC, estoy totalmente de acuerdo ( aunque pienso que estas injerencias van unidas a la idiosincracia de los paises del Sur de Europa ). Habría que educar a nuestros politicos, para que no intervinieran en la toma de decisiones judiciales, para que no intervinieran en la formación de los diferentes tribunales, para que en definitiva el poder judicial fuera totalmente independiente. Pero también, habría que impedir el posicionamiento politico de parte del sistema judicial, la injerencia partidista de estos elementos en las decisiones judiciales y sobre todo, la aparición pública de algún integrante del sistema judicial en actos públicos partidistas. En definitiva, habría que educar también a los integrantes del poder judicial.
Usted, achaca el 21% de paro actual, casi por completo, al sistema de Convenios Colectivos y a los sindicatos. Como solución pide la desaparición de los sindicatos y acabar con el sistema de CC. También, de forma somera, habla de educar al empresariado. Sr. Recarte, aquella famosa frase de " la unión hace la fuerza ", no puede ser llevada a cabo de forma sesgada. Tiene que servir para todo el mundo. Si la parte debil ( trabajadores ) de una posible negociación no cuenta con el apoyo de la unión, la parte fuerte
( empresarios ) solo mirará en un sentido, más aún si como usted mismo dice, el empresariado del sur de Europa en general, necesita educación empresarial.
De hecho, usted sabe que en realidad, salvo para los funcionarios y empresas públicas, todas las empresas privadas tiene negociaciones directas entre el empresario y sus trabajadores ( teoricamente ) a partir del CC. También sabe que, en muchos casos los empresarios no tienen en cuenta las demandas de sus trabajadores ( ni los escuchan )
y se atienen escrupulosamente al CC.
Ya hay antecedentes de la situación que usted propone. Se llama "sindicalismo amarillo".
Por lo tanto, eliminación de CC, no. Desaparición de sindicatos, no.
Reformas en todos los ámbitos, que no rompan el equilibrio, si.
Por cierto, dejar la protección de los trabajadores ante los abusos de los empresarios, en manos de los politicos con leyes de minimos, suena a chiste de mal gusto.
Saludos.
Carmelo Domínguez Antoranz.