Llamar negligente a una actuación planificada y ejecutada de acuerdo a los deseos del ejecutante es sencillamente una aberración, es como si declarasen negligente un asesinato premeditado.
Además publicar bulos para modificar el precio de las cosas es delito.
De nuevo tenemos otra pueba d ecomo actúan los jueces españoles: Con Santo Temor de Dios a los Poderosos. En este caso a los CALENTOLOGOS.
Y el problema es que en el casdo de que pase a la Audiencia, nos volv eremos a topar con le mismo problema: ¿Que Juez de este País va a poner en peligro su carrera?.
evidentemente estos distinguidos caraduras tienen tanto poder que ningún juez se atreve a que su nombre aparezca en contra de semejante lobby.