El Tribunal Supremo ha condenado al presidente de Nuevas Generaciones y diputado nacional por Valencia, Nacho Uriarte, a una multa de 2.400 euros y le ha retirado el carnet de conducir durante 8 meses por dar positivo en un control de alcoholemia tras verse involucrado en un accidente de tráfico en febrero de 2010.
Uriarte ha acudido personalmente este lunes al alto tribunal recoger la sentencia, que se ha dictado tras alcanzar su defensa un acuerdo de conformidad con la Fiscalía del Tribunal Supremo, lo que ha evitado la celebración del juicio.
A la salida del alto tribunal, Uriarte ha manifestado que había venido a cumplir, "consciente de la imprudencia" que cometió, y "con toda la responsabilidad como cualquier ciudadano"
El accidente tuvo lugar a las siete de la mañana del 19 de febrero pasado cuando el vehículo que conducía Uriarte, que salía de su despedida de soltero, chocó con otro que estaba parado.
Fuentes populares aseguraron que el accidente sólo provocó pequeños daños materiales al otro coche. Sin embargo, precisaron que cuando estuvieron cumplimentando los papeles del seguro ("un parte amistoso") pasó una patrulla de Policía Municipal y le emplazó a someterse a un control de alcoholemia.
Miligramos de alcohol en sangre
El resultado que el diputado dio en esta prueba fue levemente superior a los 0,50 miligramos de alcohol, un poco más del doble permitido. De acuerdo con el Código Penal, a partir de 0,60 miligramos por litro de aire respirado se considera delitoLa de hoy es la segunda ocasión en la que Uriarte acude al alto tribunal, donde ya compareció el pasado 13 de diciembre para prestar declaración por estos hechos ante el instructor de la causa, Joaquín Giménez.
El juez de Instrucción número 1 de Madrid, Pedro López Jiménez, a quien había correspondido inicialmente la averiguación de lo ocurrido en el accidente, se inhibió en favor del Supremo ya que Uriarte tiene la condición de aforado y correspondía al alto tribunal la tramitación de la causa contra él.
A los pocos días del accidente, Uriarte había sido citado para comparecer en un juicio rápido por estos hechos ante el juez López, si bien la vista no llegó a celebrarse al no personarse el conductor del otro vehículo. Al parecer, no había sido citado porque la Policía instruyó el atestado como una simple alcoholemia (donde no existe contrario), en vez de hacerlo como una colisión.
En el momento de los hechos, el dirigente popular, de 29 años, atribuyó lo ocurrido a un "error humano" y recalcó que asumía su responsabilidad, por lo que pidió a la portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, su cese como vocal de la Comisión de Seguridad Vial.