Como medida preventiva, se ha establecido un perímetro de seguridad de un radio de tres kilómetros en torno al lugar en el que se encontró el ave, y un segundo anillo de diez kilómetros como zona de vigilancia. En esta última, los servicios veterinarios comprueban de forma sistemática el estado clínico de las aves de las explotaciones ganaderas, al tiempo que se ha prohibido cualquier movimiento de entrada o salida, indicó el departamento de Agricultura.
Las granjas y los corrales de esta región habían sido objeto de un censo, lo que permite la aplicación inmediata de todo este operativo de control, agregó la misma fuente. En cuanto a las aves silvestres, los veterinarios están procediendo a un control reforzado.
El Gobierno francés decidió el pasado miércoles ampliar a todo el territorio la obligación de encerrar a las aves domésticas para evitar su contagio con eventuales animales silvestres enfermos y también había solicitado autorización a la Comisión Europea para vacunar a los animales de tres departamentos.
De confirmarse la presencia del virus, Francia sería el séptimo país de la Unión Europea en el que se ha detectado algún caso de gripe aviar, junto a Grecia, Italia, Eslovenia, Hungría, Alemania y Austria.