Un brindis por la juventud mejor preparada de la historia. Y casi todos estudiantes. Otro brindis por el Ayuntamiento de Sevilla, su alcalde "teorico" el socialista Molnteseirín y su alcalde "verdadero": el camarada comunista, ex-sindicalista, Torrijos. ¡¡Viva Andalucía libre, viva el Rey "Manolo Primero" y viva la tropecienta modernización. ¡Ah y muera el paro¡
Para eso si están listos mis paisanos, bueno algunos de mis paisanos, como dice Federico venga, ¡otra de gambas!.
Pues sí, posiblemente los datos no sean exactos: A lo mejor son "sólo" cinco toneladas, así que podemos respirar tranquilos...
No me lo creo. 10200 kilos de basura entre 12000 personas da una media de 0'85 kg de basura por persona. No me creo que cada persona se dejara, en término medio, casi un kilo de basura.
Simplemente asistimos a un modelo de conducta en el que el alcohol, concretamente el exceso de alcohol, aparece como un elemento indispensable como forma de relación social y dentro del esparcimiento de estos jóvenes.
El caso del botellón, cuando estos jóvenes (delincuentes), lo realizan en barrios quebrantando los derechos de los vecinos, pone de manifiesto la existencia de un pensamiento en el sujeto, donde los derechos de los demás no existen, y, evidentemente, la capacidad para ponerse en el lugar del otro está absolutamente ausente, rasgos incluidos dentro del trastorno antisocial de la personalidad.
Claro está que siempre salen los progres que repiten como loros (sin ánimo de ofender a esta especie) la consabida frase de que "lo hacen porque es una forma de rebeldía".
A veces, los comentarios sobran.