Según fuentes del 112, las playas vírgenes de El Pilar y Els Alocs, próximas a la zona arrasada, se desalojaron como medida de precaución dado que los caminos de acceso podían quedar cortados.
El fuego comenzó en la finca de Santa Elisabet paisajístico situada en el límite de los municipios de Ciudadela y Ferreries. El trabajo de los bomberos y efectivos de otros cuerpos que participan en las tareas de control y extinción se ha visto dificultado por el intenso viento, con rachas de hasta 40 kilómetros/hora, así como por lo abrupto del terreno, de complicado acceso para los vehículos contraincendios.
La acción de los aviones contraincendios desplazados desde Mallorca, que han descargado importantes cantidades de agua, y el viento, que ha ido perdiendo intensidad, han permitido delimitar el perímetro del incendio para que no se extienda a otras zonas, aunque no se encuentra totalmente dominado.
En el lugar se encuentran efectivos de los parques de bomberos de Mahón y Ciudadela, así como agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil, Protección Civil y Policía Local. Se formarán retenes para vigilar los rescoldos y evitar que el fuego se reavivar y propagar hacia otros frentes.