LD (EFE) Un hombre vestido de negro entró este jueves en un salón de la Universidad del Norte de Illinois (EEUU) y mató a cinco estudiantes antes de suicidarse. El rector de la institución educativa, John Peters, afirmó que "los muertos son cuatro mujeres y dos hombres", de los cuales cuatro fallecieron en el lugar y dos cuando eran atendidas por los servicios médicos".
El hombre mató a cuatro mujeres y a un varón en un "rápido ataque" que provocó el terror entre los estudiantes que estaban en el salón. El asesino salió de detrás de una cortina en la clase de Geología y abrió fuego contra los estudiantes. Por su parte, Donald Grady, jefe de la policía de la localidad de DeKalb, donde se encuentra la universidad, indicó que el hombre llevaba una escopeta y dos armas cortas. Agregó que había sido estudiante de la institución, pero actualmente no estaba en los registros de la Universidad, situada a unos 100 kilómetros al oeste de Chicago. Según declaró "al parecer era estudiante en alguna otra parte".
El hombre mató a cuatro mujeres y a un varón en un "rápido ataque" que provocó el terror entre los estudiantes que estaban en el salón. El asesino salió de detrás de una cortina en la clase de Geología y abrió fuego contra los estudiantes. Por su parte, Donald Grady, jefe de la policía de la localidad de DeKalb, donde se encuentra la universidad, indicó que el hombre llevaba una escopeta y dos armas cortas. Agregó que había sido estudiante de la institución, pero actualmente no estaba en los registros de la Universidad, situada a unos 100 kilómetros al oeste de Chicago. Según declaró "al parecer era estudiante en alguna otra parte".
Katie Wagner, una estudiante de la universidad, dijo a la cadena de televisión CBS que en el salón de conferencias había unos 70 alumnos cuando el hombre, al que describió como blanco, alto y delgado, inició el tiroteo. Dominique Broxton, otra estudiante, declaró que vio a dos de sus compañeros heridos cuando eran sacados del lugar en una ambulancia. "No los conozco, pero vi mucha sangre".
El Hospital de la comunidad de Kishwaukee, próximo al lugar del tiroteo, informó de que había recibido a 17 personas heridas en el incidente, tres de ellas en estado grave. Según el sanatorio, muchas de las víctimas tenían heridas en la cabeza.
Las autoridades universitarias cancelaron todas las actividades lectivas de la noche y ordenaron a sus 25.000 alumnos que no fueran a las clases. Este es el cuarto incidente de este tipo ocurrido en un centro educativo de Estados Unidos en una semana.
El viernes pasado una universitaria mató a dos compañeros antes de suicidarse en el Instituto Politécnico de Baton Rouge, en el estado de Luisiana. Este lunes otro estudiante de 17 años hirió gravemente a un compañero durante una clase de gimnasia en un centro de enseñanza secundario de Tennesse. Por último, un estudiante de 15 años fue declarado con muerte cerebral, tras ser atacado a balazos en un establecimiento secundario de Oxnard, en California.