Colabora

Un acusado de matar a su mujer dice que perdió la cabeza por que le llamo “enfermo”

El hombre de 35 años acusado de matar a su compañera sentimental, de 18 años, dijo este viernes que el día del suceso se desencadenó una discusión, la víctima le insultó y, cuando le dijo que era un enfermo, "perdí la cabeza y la pisé la barriga" mientras ella estaba tendida en el suelo tras recibir dos bofetadas. El acusado padece esclerosis múltiple.

L D (EFE) El procesado, D.M.S.G., declaró en la vista oral que se sigue con jurado popular en la Audiencia Provincial vallisoletana por hechos ocurridos la madrugada del 13 de mayo de 2002, en el piso que compartían el acusado y la víctima, S.P.C., desde que ella se trasladó de Zamora a Valladolid, en enero del mismo año, para trabajar en la línea de teléfono erótica que regentaba el encausado.

El acusado narró como la noche del suceso se encontraban ambos en el salón viendo una película clasificada "X" en la televisión y comenzaron a discutir porque ella le reprochó que no cumplía su palabra sobre la promesa de trabajo que le había hecho; la disputa "subió de tono, con insultos y le di un manotazo en la cara".

La joven resbaló entonces del sofá, cayó al suelo, siguió insultando al procesado y le dijo que era un "viejo" para ella, tras lo que D.M.S.G. le dio otro manotazo en la cara, relató el acusado. "Siguió increpándome" y, cuando le dijo que era un enfermo -el acusado padece esclerosis múltiple-, "pienso que perdí la cabeza y le pisé la barriga" mientras ella seguía en el suelo, agregó.

Una relación sentimental "si hubiera habido más tiempo"

Explicó que después de las bofetadas y el pisotón en la tripa, la joven vomitó, por lo que la acompañó al servicio con el fin de que se refrescase y se le pasara el mareo que empezó a sentir. Al comprobar que ella mejoraba, se fue a limpiar el sofá y el suelo del salón de vómito; regresó al cuarto de baño, abrió las ventanas del apartamento y paseó con la joven por la casa para que se despejara, hasta que observó que volvía a encontrarse mareada y que se trababa al hablar, por lo que reclamó ayuda médica.

Describió la relación de ambos de carácter "laboral, sexual y, si hubiera habido más tiempo, quizá sentimental", dijo el procesado, quien admitió haber agredido a la víctima en dos ocasiones anteriores a la de su muerte, con bofetadas y empujones, sin que ella le hubiera denunciado.

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario