L D (Agencias) Según publica este lunes el diario El Mundo , uno de los principales problemas de la línea del AVE entre Madrid y Lérida es el sistema de señalización. Esta línea de Alta Velocidad está provista de un sistema para regular el tráfico llamado ERTSM que en estos momentos no está en funcionamiento. En su lugar, se está utilizando el ASFA, el mismo que Renfe usa para las líneas regulares, y que no reúne las garantías necesarias de seguridad.
Sin embargo, el plazo de un año recomendado por los expertos podría disminuir si los trabajos de puesta a punto dan sus resultados de manera más rápida. Por el momento, un grupo de trabajo compuesto por representantes de Renfe y por el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias hará un diagnostico de la situación y a partir de entonces se podrá determinar el tiempo de aplazamiento de estreno del AVE Madrid-Lérida.
Explicaciones de Fomento
Por otro lado, el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, dijo que el socavón junto a la línea de alta velocidad en Zaragoza es consecuencia de los trabajos de excavación de una obra de la Diputación General de Aragón y no "un problema de defecto de construcción" de la línea. Dijo que esas obras, que se realizaban "a ocho metros por debajo de la rasante de la línea de alta velocidad y de la línea convencional a la entrada de Zaragoza", han provocado un "movimiento de tierras" que han afectado a las líneas convencionales y han aconsejado que el tráfico convencional "no se mantenga" mientras se procede a su reparación. El socavón es de unos cuatro metros de profundidad y tres de diámetro y dejó suspendidos los raíles de la ronda sur de Zaragoza paralelos a la vía de alta velocidad.
Álvarez Cascos, que dijo no poder responsabilizarse de "valoraciones escasamente ajustadas a la realidad", confió en que no se plantee "ninguna dificultad" con la suspensión del tráfico, al precisar que Zaragoza "tiene alternativas" para ello. Subrayó que el incidente no se debe a "un problema de defectos de la construcción de la línea de alta velocidad, sino a una consecuencia de esas imprescindibles obras que hay que realizar colaborando con las administraciones para que una infraestructura no impida el paso de otra infraestructura".
Tras precisar, "sin ningún tipo de reproche", que en ocasiones las obras plantean "algún tipo de dificultad", dijo que Fomento colaborará con la institución responsable de la obra causante del movimiento de tierras "para restablecer" ambas obras. Interrogado sobre la consideración del Colegio de Geólogos de Aragón de que no era la zona más idónea para construir la vía, Cascos dijo que no va a "discutir con instituciones científicas". Subrayó que se trata de un expediente que lleva años cumplimentando trámites informativos y de impacto medioambiental tras señalar que "el Ministerio de Fomento y los técnicos ferroviarios no han necesitado hasta ahora grandes requerimientos ni grandes asesoramientos externos para demostrar su cualificación".
Sin embargo, el plazo de un año recomendado por los expertos podría disminuir si los trabajos de puesta a punto dan sus resultados de manera más rápida. Por el momento, un grupo de trabajo compuesto por representantes de Renfe y por el Gestor de Infraestructuras Ferroviarias hará un diagnostico de la situación y a partir de entonces se podrá determinar el tiempo de aplazamiento de estreno del AVE Madrid-Lérida.
Explicaciones de Fomento
Por otro lado, el ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, dijo que el socavón junto a la línea de alta velocidad en Zaragoza es consecuencia de los trabajos de excavación de una obra de la Diputación General de Aragón y no "un problema de defecto de construcción" de la línea. Dijo que esas obras, que se realizaban "a ocho metros por debajo de la rasante de la línea de alta velocidad y de la línea convencional a la entrada de Zaragoza", han provocado un "movimiento de tierras" que han afectado a las líneas convencionales y han aconsejado que el tráfico convencional "no se mantenga" mientras se procede a su reparación. El socavón es de unos cuatro metros de profundidad y tres de diámetro y dejó suspendidos los raíles de la ronda sur de Zaragoza paralelos a la vía de alta velocidad.
Álvarez Cascos, que dijo no poder responsabilizarse de "valoraciones escasamente ajustadas a la realidad", confió en que no se plantee "ninguna dificultad" con la suspensión del tráfico, al precisar que Zaragoza "tiene alternativas" para ello. Subrayó que el incidente no se debe a "un problema de defectos de la construcción de la línea de alta velocidad, sino a una consecuencia de esas imprescindibles obras que hay que realizar colaborando con las administraciones para que una infraestructura no impida el paso de otra infraestructura".
Tras precisar, "sin ningún tipo de reproche", que en ocasiones las obras plantean "algún tipo de dificultad", dijo que Fomento colaborará con la institución responsable de la obra causante del movimiento de tierras "para restablecer" ambas obras. Interrogado sobre la consideración del Colegio de Geólogos de Aragón de que no era la zona más idónea para construir la vía, Cascos dijo que no va a "discutir con instituciones científicas". Subrayó que se trata de un expediente que lleva años cumplimentando trámites informativos y de impacto medioambiental tras señalar que "el Ministerio de Fomento y los técnicos ferroviarios no han necesitado hasta ahora grandes requerimientos ni grandes asesoramientos externos para demostrar su cualificación".