LD (Pedro de Tena) Lo del barco New Flame viene de agosto. No viene de este domingo. Siete meses. Fue el 12 de agosto cuando este carguero encalló en las aguas de al bahía de Algeciras con más de 40.000 toneladas de chatarra y 500 de fuel. Había chocado antes con un petrolero. Ahora, con el temporal de levante, el New Flame se ha hundido y el chapapote llega a Algeciras (chinos manchados de arena según Tom Martín Benítez, informador oficial de Canal Sur Radio) y hay dudas acerca de si lo que lleva en su seno es simplemente chatarra.
Varado en aguas gibraltareñas, la Junta no ha hecho más que limpiar y poco lo que había llegado hasta ahora del chapapote a las costas. Pero no ha previsto, no ha investigado, no ha exigido, no ha clamado como lo hizo, por ejemplo, en el caso Prestige o cuando el caso, ahora más claro, del Tireless. ¿Y si dentro de este barco y con la consideración de "chatarra" estuvieran otra clase de productos? Un ejemplo. ¿Podría haber "chatarra sanitaria" en este barco plena de productos como el mercurio altamente contaminantes como sospechan algunas organizaciones ecologistas? ¿Qué lleva el barco dentro de sus entrañas? Que Javier Arenas pida que el señor Chaves dé la cara, es lo menos que puede pedirse.
El pasado 26 de diciembre, cuatro meses después del hundimiento del New Flame y ante un nuevo vertido, el Gobierno andaluz anunció posibles acciones legales contra el gobierno gibraltareño. La Junta encargó a su gabinete jurídico que redactara una demanda por daños y perjuicios contra el Ejecutivo de Gibraltar al que considera el "único responsable" de la situación. Pero nada de nada.
Asimismo, se reafirmó en que la chatarra –cuya composición físico química no ha sido desvelada– 'ya se está derramando de las bodegas del buque' y reiteró que Gibraltar 'no tiene intención de recuperarla', generando una 'liberación incontrolada que repercutirá negativamente en las pesquerías de la zona y en la salud de las personas a medio largo plazo'.
Incluso El País se siente incapaz de salvar a Manuel Chaves de este escándalo de ineficacia y desidia políticas. Dice: "El New Flame lleva semihundido seis meses, pero la Junta no ha logrado que el Gobierno de Gibraltar pase de las palabras a los hechos, es decir, rescatara el barco, desde que el pasado 12 de agosto el buque con 42.000 toneladas de chatarra quedara al vaivén de las olas en aguas de la colonia británica. El nuevo vertido de combustible del buque, a punto de hundirse, colmó ayer la paciencia de la oposición que pidió cuentas al Ejecutivo andaluz por su pasividad.
Javier Arenas pidió al presidente andaluz que "dé la cara, en vez de escudarse en las autoridades de Gibraltar" y añadió que si esto hubiera pasado con un gobierno del PP habría habido "hasta seis manifestaciones en el Campo de Gibraltar", Coalición Andalucista reclamó la dimisión de "algún alto cargo de la Junta, si hay un mínimo de dignidad".
Los Ayuntamientos de la Línea de la Concepción y de Algeciras anunciaron que se plantean emprender acciones jurídicas contra las autoridades de Gibraltar. Aunque en La Línea de la Concepción no se registró ayer ninguna consecuencia del hundimiento de la sección de popa del New Flame, el alcalde, Juan Carlos Juárez, ordenó al concejal de Seguridad Ciudadana y Protección Civil, Francisco Muñiz, la puesta en marcha inmediata de un plan de emergencia municipal para vigilar el litoral linense. "Aunque todo hace indicar que el temporal no va a permitir que los nuevos vertidos líquidos procedentes del New Flame lleguen a las playas de La Línea, hemos creído conveniente vigilar la zona para actuar si fuese necesario en cualquier momento. A pesar de que la componente del viento ayuda a que la contaminación no recale en nuestras playas, también es cierto que existe mar de fondo, con fuerte oleaje, lo que podría ser perjudicial", puntualizó el Ayuntamiento en un comunicado de prensa.