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Salgado arremete contra la “jerarquía eclesiástica” y dice que “desconoce la realidad” de España

La ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, ha acusado este lunes a la jerarquía eclesiástica española de "desconocer la realidad del país" y de "confundir moral con ética". Salgado señaló que al Gobierno no le molesta que los obispos acudan a algunas manifestaciones en contra de algunas leyes, ya que "el derecho de manifestación no se le puede negar a ningún ciudadano".

L D (Europa Press) No obstante,  la ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, considera que se produce una "desinformación" pues, en su opinión, la jerarquía eclesiástica que se apunta a estas manifestaciones parece "desconocer la realidad" que se vive en España, que es "un país abierto, tolerante, donde cada persona puede actuar de acuerdo con sus criterios morales dentro de un marco de normas éticas". "La jerarquía eclesiástica a veces confunde la moral con la ética, y eso es mala cosa", agregó en declaraciones a Com Radio.
 
En cuanto a los medios de comunicación, afirmó que cada uno elige una línea editorial para sus opiniones, pero pidió a la prensa "veracidad" en las informaciones, "que contraste sus fuentes, lo que está en las normas y criterios de buenas prácticas", concluyó la Ministra.
 
Sobre el Hospital Severo Ochoa 
 
Salgado, ha dicho este lunes que el caso del Hospital Severo Ochoa de Leganés ha tenido un efecto grave en la sanidad pública, ya que se ha iniciado una "actitud de medicina defensiva" por parte de los profesionales. También dice que el ciudadano va con menos confianza al médico y que  algunos profesionales de enfermería se van de España a otros países por "falta de motivación".
 
La ministra de Sanidad, Elena Salgado, ha asegurado que desde que comenzó el caso de las presuntas sedaciones irregulares en Leganés, "no sólo el ciudadano va con menos confianza al médico, sino que el propio médico comienza a aplicar una medicina defensiva pensando más en los efectos, en las demandas que algunas personas o asociaciones puedan interponer, que en la calidad de vida del paciente".
 
A este respecto, la titular de Sanidad ha indicado que "el peor enemigo del médico es aquel que no confía en que el médico está para ayudar a los pacientes". A su juicio, en muchas ocasiones los abogados se aprovechan de la situación, aunque "lo importante es la actitud de los ciudadanos y de los responsables políticos, que son los que tienen que crear ese clima de confianza que no se ha contribuido a crear en el caso de la Comunidad de Madrid".
 
Por otro lado, la ministra aseguró que algunos profesionales de enfermería se van de España a otros países por "falta de motivación", y subrayó que hay que afrontar el problema de los recursos humanos entre todas las comunidades autónomas, que tienen que ponerse de acuerdo para crear un marco de condiciones favorables para que los enfermeros se queden en España.
 
La ministra se refirió también a los últimos avances conseguidos en la investigación con células madre. "Es una línea de investigación tan prometedora que en términos sociales estamos obligados a hacer investigación en ese campo dado que tenemos los científicos que pueden llevarla a cabo", agregó. No fue tan optimista en relación al sida, ya que, en su opinión, sólo se solucionará cuando haya una vacuna. Finalmente, afirmó que las listas de espera de la sanidad pública son una realidad, aunque las más largas desde el punto de vista quirúrgico son las cataratas y los “juanetes”. "En los casos de gravedad las listas de espera son pequeñas", aseveró. No obstante, abogó por mejorar la eficiencia de los servicios sanitarios y, en particular, reducir las listas de espera de las pruebas diagnósticas. "Tenemos derecho a saber si tenemos alguna enfermedad grave para intentar de actuar lo antes posible", concluyó.

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