(Libertad Digital) El economista Javier Sala i Martín lleva años ocupándose del problema del calentamiento global y de la lucha contra la contribución humana al mismo, así como las repercusiones que tendría sobre la economía y el desarrollo. En un reciente artículo publicado en La Vanguardia, Sala afirma que la película "Una verdad incómoda" "está plagada de mentiras" y es, en realidad, un ejercicio de "cinematografía propagandística". Le compara con Michael Moore. Sala i Martín identifica ocho afirmaciones de Al Gore desmentidas por el propio IPCC.
1) Al Gore dice que la totalidad de los científicos están de acuerdo con los postulados que mantiene en Una verdad incómoda. Si bien “es verdad que hay casi unanimidad en que la Tierra se ha calentado (menos de un grado, eso sí) durante el último siglo, la desafortunadamente para la credibilidad de Gore, la unanimidad se acaba aquí”. El propio informe del IPCC es prueba de ello.
2) Gore muestra imágenes de “un océano Ártico sin hielo y de una Groenlandia y una Antártida descongelándose”, pero como recuerda Sala i Martín “es falso que lo mismo esté pasando en la Antártida: El IPCC dice que las temperaturas allí no sólo no han subido sino que han bajado [...] y se espera que su masa de hielo aumente durante el próximo siglo”.
3) Otra afirmación a la vez catastrófica y falsa es que el deshielo causará una subida del nivel del mar de siete metros". De hecho el informe del IPCC prevé "que el nivel subirá no los siete que dice Gore sino entre 0,18 y 0,59 metros”.
4) Uno de los momentos más aterradores de la película es cuando “Gore sugiere que el deshielo de Groenlandia hará que se detenga la corriente del Atlántico que trae agua caliente de los mares del Sur y provocará una glaciación en Europa”. Pero “los científicos del IPCC están 90 por ciento seguros de que eso no pasará”, atestigua Sala. Aquí se erige Al Gore en un auténtico escéptico.
5) El quinto punto recogido por el economista catalán es que “el calentamiento global causará millones de muertos”. Pero según el IPCC “los altibajos climáticos locales como los que sufrió Europa en el 2003 no se pueden relacionar con el aumento de CO2”, y añade que “para ser intelectualmente honesto, a la cantidad de gente que se morirá por culpa del calor Gore debería restar la que dejará de morir de enfermedades relacionadas con el frío (hipotermias, gripes, enfermedades respiratorias y cardiovasculares relacionadas con las bajas temperaturas)”
6) Pese a que el informe de Naciones Unidas no hace mención alguna, Al Gore llega al extremo de decirle a los espectadores que “la gripe aviar, la tuberculosis, la SARS e incluso la guerra de Darfur están causadas por el calentamiento global”.
7) En el penúltimo punto recuerda que Al Gore no teme afirmar que “los costes de las compañías de seguros para hacer frente a los huracanes se han disparado” pese a que el informe "no dice nada de eso".