L D (Europa Press) "Va a haber un protocolo, espero que en breve, que todo el mundo tengamos que cumplir y no tengamos que ver situaciones como la que hemos visto, vinculadas a Malta, donde los pescadores de aquí y allá, nuestros pescadores, han actuado como se ha de actuar en el mar, ayudando y auxiliando –comentó–. Después se ha de llevar a estas personas al puerto más cercano que esté en disponibilidad de acogerlos y a partir de ahí ver cuál es la situación de cada una de ellas y, si no pueden ser repatriadas de forma inmediata, tener un protocolo donde quede muy claro qué se hace con ellas y cómo se hace esa distribución".
Este protocolo pretende establecer también, según explicó, cuál es la obligación de los países desde donde han salido los inmigrantes y su disponibilidad para trabajar. Así, recordó que en el último de los rescates, los náufragos fueron llevados a Libia, que se encargó de su repatriación. "Si podemos también conseguir esa colaboración desde los países de donde han salido, estamos dando otro paso cualitativo muy importante, y también un mensaje inequívoco a las mafias".
En una entrevista concedida a Europa Press, la secretaria de Estado facilitó los datos de inmigrantes llegados a España de forma clandestina en los primeros siete meses del año, un total de 7.924. Esta cifra supone un 54 por ciento menos de llegadas que en el mismo periodo del año anterior, es decir, más de 9.000 inmigrantes menos.
Concretamente, este año han llegado a Canarias 5.640 inmigrantes, lo que supone un descenso del 59 por ciento, 8.000 personas menos. Mientras, hasta Andalucía arribaron 2.200 personas, 1.400 menos que en el mismo periodo del año anterior o, lo que es lo mismo, un 39 por ciento menos. "El balance pone de manifiesto que ese trabajo está siendo positivo pero que tenemos que seguir trabajando, porque al mismo tiempo siguen llegando cayucos a nuestras costas, y van a seguir viniendo mientras existan desigualdades tan enormes entre el mundo rico y el mundo pobre", valoró.
"Tienen que implicarse más países"
En este sentido, subrayó que en la lucha contra la inmigración clandestina "deben implicarse más países" porque en África el trabajo lo está haciendo España pero "estas personas no vienen a España vienen al mundo desarrollado que es la UE". "Todos deben colaborar, todos debemos tener muy claro que África está en una situación de pobreza y depauperación absoluta", insistió.
Rumí admitió la "paradoja" de que cuánto más eficaces son los controles marítimos más peligrosas son las rutas que utilizan las mafias. "El Gobierno tiene que seguir trabajando para hacer cada vez más difícil que la inmigración clandestina y que las mafias no consigan sus objetivos. Nunca se ha repatriado tanto y a tantos países", dijo al tiempo que enumeró las rutas marcadas hasta el momento: frontera marítima con Marruecos, fronteras terrestres de Ceuta y Malilla, salidas desde Mauritania, luego desde Senegal y desplazamiento hacia Gambia o Guinea Conakry.
Esa peligrosidad da lugar a tragedias como el naufragio de un cayuco a 90 millas al sur de Tenerife en el que han podido desaparecer unas 80 personas, pero el Ejecutivo no se resigna a ellas, según Rumí. "El Gobierno ha dado muestras de que no nos acostumbramos a los naufragios. No –enfatizó–. Son dramas y tragedias porque son evidentemente la muestra más evidente de las consecuencias de la inmigración clandestina. Cada vez que hay la pérdida de una vida humana, le puedo asegurar que quien tiene la responsabilidad en inmigración nos sentimos profundamente consternados".
Por otro lado, la secretaria de Estado criticó a quienes especulan con el número de vidas que se han quedado en el mar. "Cuando alguien, en este caso el PP, habla del número de pérdidas de vidas humanas es especular. Creo que en este tema no se debe especular. No podemos saberlo, incluso en el último naufragio podemos hacer una estimación, pero sólo en función de lo que nos dicen los propios inmigrantes. Rescatamos, gracias a la labor de los servicios de Salvamento Marítimo, a 48 personas. ¿Cuántas perdieron la vida? No podemos decir cuántas personas han perdido la vida porque no lo sabemos", reprochó.
Declaración "ruines" del Gobierno canario
También denunció la actitud del Gobierno canario ante estos hechos. "Las únicas declaraciones que yo oigo del Gobierno de Canarias es cuando hay lamentablemente una tragedia, unas declaraciones ruines e indignas de dirigentes con capacidad política", agregó.
En todo caso, insistió en que se está produciendo un descenso de las llegadas y que los Centros de Internamiento en Canarias están a un 20 o 30 por ciento de su capacidad. "Estamos en condiciones de asistir a personas que, como este fin de semana, lamentablemente han vuelto a llegar. Pero, nada que ver con el año pasado", añadió. A su juicio, el Ejecutivo del archipiélago "podría tener más disposición para toda la cuestión sanitaria" de los 'clandestinos' llegados a las islas, ya que hasta el momento son atendidos a través de los servicios de Cruz Roja y Centros de Internamiento.
En desacuerdo con el informe de HRW sobre menores
Por otro lado, la responsable de Inmigración se refirió al informe de la ONG Human Right Watch que denuncia situaciones de maltrato a menores extranjeros no acompañados en cuatro centros de emergencia de Canarias. "No comparto en absoluto el informe, estoy en desacuerdo", dijo al tiempo que avanzó que los gobiernos canario y central "aclararán" la atención que se presta a los menores para que no quede "ni la menor sombra de duda".
En su opinión, este informe, además de "muchas contradicciones", está en contra de algo por lo que apuesta firmemente el Gobierno: el retorno de los menores a sus países de origen. "El retorno asistido o la repatriación forma parte de la política del Gobierno porque forma parte de la protección del menor –recalcó– Y, sobre todo, porque el Gobierno no va a permitir que la llegada de inmigrantes menores no acompañados se convierta en una vía alternativa a las mafias".
Por eso, indicó que los consulados marroquíes ya han recibido instrucciones del Ejecutivo de Marruecos para que agilicen 800 expedientes de chavales que se encuentran bajo la tutela de la Junta de Andalucía y a falta del visto bueno de su país de origen para proceder al retorno asistido. Por el momento, España ha firmado convenios de reagrupación de menores con Marruecos y Senegal, países de los que proceden más del 90 por ciento de estos chicos, y no tiene previsto negociar acuerdos similares con otros países subsaharianos.
En todo caso, aseguró que el Gobierno seguirá visitando países del África subsahariana y reuniéndose con sus mandatarios para conseguir un control eficaz de la inmigración clandestina. "Creo que es un acierto visitar los países; creo que da una muy buena información de la realidad; y, sobre todo, creo que algunos políticos de este país deberían conocer cuál es la realidad del continente africano, para no decir algunas barbaridades. También para controlar que controlen (los propios países)", concluyó.