Rubalcaba reconoce que los datos de siniestralidad son "malos" y que el carné por puntos no es "el bálsamo de Fierabrás"

Punto y final a la euforia del Gobierno Zapatero por el supuesto descenso de siniestralidad en las carreteras tras la implantación del carné por puntos. El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, reconoció este martes que los datos de mortalidad durante esta Semana Santa, en las que han perdido la vida 106 personas, son "malos". En relación a las críticas sobre la efectividad del carné por puntos, Rubalcaba afirmó que no se trata de una "pócima milagrosa ni del bálsamo de Fierabrás", pero que tampoco es un instrumento ya agotado.

L D (Agencias) En relación a las críticas de la efectividad del carné por puntos, Rubalcaba afirmó que no se trata de una "pócima milagrosa ni bálsamo de Fierabrás" pero que tampoco es un instrumento ya agotado, por lo que "ni muchísimo menos ha dado todo de sí". Por el contrario, considera que es un mecanismo aún válido que seguirá dando sus frutos, como demuestra que desde su entrada en vigor en julio de 2006 haya reducido el número de muertos una media de 12,83 por ciento (350 muertos menos con respecto al año anterior).

Por meses, el descenso en el número de muertos en carretera desde la puesta en marcha del permiso de conducir por puntos pasa desde una bajada del 25 por ciento hasta el cero por ciento entre el mejor y el peor mes en cuanto a resultados. También destacó que el carné por puntos dio mejores frutos en su inicio en España que en su puesta en marcha en otros países como Francia o Italia.

Tras señalar que las cifras de siniestralidad en la red viaria hace ser "perseverantes y reflexivos" y que las políticas en esta materia son "de largo aliento", considera, no obstante, que hay que "poner las cosas en su justos términos" porque se ha mejorado en esta cuestión de forma "persistente" desde 2003. A su juicio, las políticas en materia de seguridad vial "están dando su resultado" pero, como sigue habiendo "muchos muertos", hay que seguir trabajando.

"En conjunto, hay que ver las cosas con perspectiva porque son medidas a largo plazo", recalcó Rubalcaba en relación a los cambios de usos y costumbres de los conductores y mejorar las infraestructuras, las carreteras y los coches. Sin embargo, anunció en rueda de prensa para hacer un balance de la Operación Especial de Tráfico de Semana Santa la intención de "acelerar" las políticas y las medidas que "en su conjunto ya están dando resultados".

Agilizar las multas

Concretamente, se revisarán los procedimientos administrativos para sancionar a los infractores, algo que el titular del Ministerio de Interior explicó que no es fácil porque la legislación es "garantista" con los derechos de los que van a ser multados. De momento, ya se ha establecido un grupo de trabajo que ha puesto "sobre la mesa" un estudio para buscar mecanismos que aceleren los procesos de sanción correspondientes.

Sin embargo, el ministro de Interior aseguró que se está aplicando el carné por puntos "con toda celeridad" en su tramitación administrativa, con la retirada ya de 400.000 puntos a 120.000 conductores y 1,5 millones de puntos en tramitación de retirar por 500.000 infracciones, además de que 500 conductores ya han perdido el permiso de conducción por la eliminación de todos sus puntos y que otros 20.000 han recibido cartas anunciando la pérdida de la mitad de los puntos.

Además, se creará un "gran" centro de automatización de todas las multas, cuyo concurso de licitación de obra se dará a conocer la próxima semana, y se dotará a los agentes de Tráfico de la Guardia Civil de mecanismos PDA, con un proyecto piloto en Segovia, para multar instantáneamente mediante "banda ancha" y evitando el papeleo. En esta línea, Rubalcaba hizo alusión a un próximo concurso de 500 plazas para agentes de tráfico antes de verano y otro cupo de 500 antes de septiembre.

Sobre las carreteras secundarias y de doble sentido, en las que 79 personas han muerto, el ministro valoró que las comunidades autónomas ya trabajan en sus propios planes de seguridad vial incluyendo mejoras de estas vías, además de los 56 millones que el Estado destinará este año a eliminar los puntos negros y 36 millones para mejorar la señalización y la pintura. Durante estas vacaciones de Semana Santa, hay fallecido un total de 43 personas en la red de carreteras del Estado; 42 en las autonómicas, y 17 en las dependientes de diputaciones, cabildos y municipios.

En materia de formación y educación, Rubalcaba recordó que en septiembre ya se comenzarán a impartir en la educación obligatoria de las escuelas los primeros módulos sobre educación vial a través de la nueva materia de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, además de contar con los cambios en los contenidos del carné de conducir, que "todavía no están dando sus frutos". Finalmente, recordó al guardia civil Fernando García, fallecido por atropello en un accidente al realizar sus labores de tráfico, y a las familias de quienes han perdido la vida en las carreteras.

Tres días "negros"

En comparación con el pasado año, han muerto en accidentes de tráfico durante Semana Santa cuatro personas menos que el pasado año (110 muertos), lo que supone un 3,64 por ciento menos. Así, ha habido 3,74 fallecidos por millón de vehículos y diez víctimas mortales por día, siendo los más "negros" el sábado 31 de marzo (20 muertos), el jueves 5 de abril (16) y el sábado 7 de abril (15), en los que se han producido casi la mitad de los fallecimientos, según el balance presentado por Rubalcaba.

Las salidas de la vía han sido el tipo de accidente mayoritario, con un 44 por ciento de los accidentes mortales y un 39 por ciento de los fallecidos, aunque en esta Semana Santa, inferiores que en las anteriores, mientras el 23 por ciento de los muertos ha perdido la vida en accidentes frontales, con un incremento significativo respecto a otras vacaciones de Pascua. La velocidad vuelve a ser uno de los "grandes problemas" a seguir tratando –según el ministro– provocando el 38 por ciento de los fallecidos y el 27 por ciento de los casos de infracción de la norma de circulación.

Por grupos de edad, los conductores de entre 15 y 24 años y 25 y 34 años presentan los descensos más considerables, con ocho y 5 fallecidos menos que en las vacaciones de Pascua de 2006, respectivamente. Además, el 27 por ciento de los muertos en turismo no utilizaba cinturón, porcentaje inferior al que registró en años anteriores (45 por ciento en 2006).

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