L D (EFE) Rocío Jurado ingresó el pasado 30 de julio en la Clínica Montepríncipe de Madrid con unas molestias abdominales y allí se le diagnosticó una ictericia, por lo que tuvo que ser intervenida por el equipo de la Unidad de Cirugía Hepato-Bilio-Pancreática, con resultado satisfactorio.
La cantante de Chipiona, que fue dada de alta el 20 de agosto, declaró que desde el primer momento le dijeron que tenía un tumor que era cáncer de nivel dos en "un sitio peligroso, ya que aumentaba el nivel de bilirrubina en la sangre", por lo que "había que quitarlo, ya que era muy difícil de detectar en el lugar que estaba en el abdomen". "Yo nunca había tenido dolores de estómago", comentó la cantante, que asegura que eran tan fuertes que le impedían actuar.
José Ortega Cano, su marido, que la acompañaba este viernes en casa, viajará con ella a Houston, en donde está estudiando su hijo José Fernando en un colegio de Melbourne, así que aprovecharán para verle y pasar con él largas temporadas, comentó la cantante que dice apoyarse en la fe y en saber que hay tanta gente rezando por ella.