La institución de fiscalización de todas las instituciones y empresas públicas, ha confirmado este no tan extraño robo habida cuenta de la historia andaluza en cuanto a robos significativos. La sustracción de estos elementos informáticos fue comunicada a la Policía Nacional por la secretaria general técnica del organismo, Milagros Carrero, una vez confirmado que ningún trabajador tenía pendiente de devolver computadora alguna. Con este robo, Andalucía se está convirtiendo en la comunidad donde los "robos con sentido político" se dan con mayor frecuencia.
Al parecer, el robo de los ordenadores se produjo en varias fases. No se ha encontrado nada forzado, ni puertas ni armarios, pero es evidente que el robo se ha producido. Los servicios de seguridad del edificio han intensificado la vigilancia durante las entradas y salidas que se producen la sede.
Significativamente, los ordenadores robados se usaban habitualmente en los trabajos de evaluación de los técnicos y auditores no se sabe de qué temas concretos. La Cámara ha restado importancia a este fallo en la seguridad de su sede, arguyendo que la información de esos portátiles "queda depositada en el servidor" en la institución. Según la Cámara es muy difícil que nadie pueda acceder a la información contenida en los portátiles porque tienen una doble clave de acceso, una para iniciar el equipo y otra para entrar en la intranet.
El Mundo vincula este robo con la información sobre las indemnizaciones por supuestos gastos de representación que no se tienen que justificar con facturas y que, desde 2004, se vienen repartiendo los miembros del pleno (consejeros y secretaria general técnica) a modo de sobresueldos. Como es sabido, los gastos de la Cámara dependen de la presidencia del Parlamento andaluz, en manos del PSOE.
Otros robos extraños en Andalucía
No es la primera vez que tienen lugar en Andalucía robos "curiosos" que tienen importantes repercusiones judiciales y políticas.
El 17 de diciembre de 2003, el magistrado de Sevilla Conrado Gallardo daba los últimos retoques al fallo que condenaba a Juan Guerra a un año de prisión y 35 millones de multa por delito fiscal. Al regresar a su despacho tras una ausencia, comprobó que el borrador de la sentencia había desaparecido. Gallardo convocó a la prensa para adelantar su resolución y evitar así que alguien la aprovechara. Lo contó El País.
El mismo caso Juan Guerra originó que el juez Ángel Márquez descubriese una mañana que la mesa de su despacho estaba desordenada y algunos objetos del escritorio, entre ellos el teléfono, habían modificado su posición. La denuncia quedó archivada. Lo contó asimismo El País.
Cambiazo de billetes del caso Ollero. En contra de la orden judicial de custodia de los 22 millones pagados por la constructora Ocisa a Jorge Ollero, entre el banco y los empleados de una empresa de transporte se deshicieron del precinto y dieron curso al cuerpo del delito, los billetes de 10.000 pesetas intervenidos por la policía. Afortunadamente, según informó El País , en el acta judicial se habían anotado los números de serie y con ello quedó preservada la prueba.
En 2002, la Audiencia Provincial de Málaga reabría el caso por el robo de sumarios en Marbella tras estimar el recurso presentado por la portavoz del grupo municipal socialista, Isabel García Marcos, contra el auto de sobreseimiento provisional dictado por la magistrada del Juzgado de Instrucción número tres de Marbella, María José Rivas. Esta juez abrió una investigación por la desaparición de casi 50.000 documentos judiciales en Marbella, muchos de ellos relacionados con procesos abiertos al ex alcalde Jesús Gil.
La prueba clave del proceso que seguía el presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, contra El Mundo desapareció de un juzgado de Sevilla. Era un vídeo en el que un testigo acusaba a Chaves de estar tras el espionaje al presidente de Caja San Fernando. La cinta, de la que los juzgados tenían dos copias, mostraba cómo un supuesto espía acusa al presidente de la Junta de Andalucía y al secretario de Organización del PSOE de Andalucía (PSOE-A), Luis Pizarro, de estar detrás del espionaje al ex presidente de Caja San Fernando.
La Unidad de Asuntos Internos de la Policía investiga todavía el robo de 1.000 kilos de hachís que se encontraban almacenados en el interior de dos camiones de la Policía, aparcados en el interior de la Jefatura Superior de Policía de Blas Infante. El robo de cocaína en la Comisaría de Sevilla se realizó durante meses sin que nadie se percatara y tuvo como consecuencia el sobreseimiento de importantes causas criminales contra narcotraficantes.
En este año de 2009, los juzgados de Sevilla han sufrido nuevos robos. Un juzgado de Sevilla ha sufrido en marzo el robo de un ordenador portátil y varios lápices de memoria que estaban depositados en un armario del despacho del secretario judicial, en un suceso que se une a la oleada de robos que sufrieron varios juzgados en septiembre pasado cuando los ladrones penetraron en varios de ellos y se llevaron ordenadores y teléfonos móviles.
La Policía Nacional investiga el robo de cinco ordenadores en el nuevo Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Marbella. Los hechos ocurrieron durante la pasada noche en las dependencias judiciales situadas en la calle Doha del municipio. Los autores del robo accedieron al edificio por la puerta principal, que aún no estaba finalizada y se encontraba cubierta con una capa de pladur, según declararon a Europa Press. Así, se llevaron cinco ordenadores que se encontraban en la sala de los funcionarios y que eran visibles desde del exterior con total facilidad. El nuevo juzgado dedicado a la violencia de género, al frente del cual está la magistrada Carmen Rodríguez Medel, hasta ahora titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la ciudad, debía comenzar a funcionar el pasado 28 de diciembre, pero, según manifestaron los trabajadores, no lo hizo hasta días después.