L D (EFE) Este proyecto piloto, inédito en Europa, se empleará en agresores sexuales, así como en individuos acusados de violencia doméstica, reincidentes y delincuentes menores de edad. Según el sistema, se probarán dos tipos diferentes de dispositivos. Uno de ellos registra los movimientos del agresor y los envía en determinados momentos del día para ser supervisados. El otro, sigue sus pasos en tiempo real y lo localiza en un mapa que permite actuar inmediatamente si fuera necesario.
Por el momento, el sistema de control por satélite lo portarán 120 reclusos de las diferentes áreas inglesas que participan en el proyecto, el llamado Gran Manchester Hampshire y los Midlands . "Permitirá saber si los agresores se ciñen a sus permisos y se mantienen alejados del crimen", dijo Blunkett al dar a conocer los detalles de la denominada "prisión sin barrotes". El sistema hará sonar una alarma si, por ejemplo, un pederasta se aproxima a un colegio o a un parque infantil, y la policía podrá saber con exactitud dónde se encuentra.
Esta tecnología permitirá desarrollar y aplicar penas más duras a fin de prevenir la reincidencia de los agresores, dijo Blunkett, en un discurso en la ciudad de Manchester. El ministerio de Interior ha destinado casi cinco millones de euros para este proyecto. "Este sistema de seguimiento es muy caro, y por lo tanto se aplicará de una forma limitada sobre aquellos agresores que representen un mayor peligro para la sociedad", dijo Harry Fletcher, miembro de la Asociación Nacional de la Policía.
Por el momento, el sistema de control por satélite lo portarán 120 reclusos de las diferentes áreas inglesas que participan en el proyecto, el llamado Gran Manchester Hampshire y los Midlands . "Permitirá saber si los agresores se ciñen a sus permisos y se mantienen alejados del crimen", dijo Blunkett al dar a conocer los detalles de la denominada "prisión sin barrotes". El sistema hará sonar una alarma si, por ejemplo, un pederasta se aproxima a un colegio o a un parque infantil, y la policía podrá saber con exactitud dónde se encuentra.
Esta tecnología permitirá desarrollar y aplicar penas más duras a fin de prevenir la reincidencia de los agresores, dijo Blunkett, en un discurso en la ciudad de Manchester. El ministerio de Interior ha destinado casi cinco millones de euros para este proyecto. "Este sistema de seguimiento es muy caro, y por lo tanto se aplicará de una forma limitada sobre aquellos agresores que representen un mayor peligro para la sociedad", dijo Harry Fletcher, miembro de la Asociación Nacional de la Policía.