LD (Agencias) Los artistas callejeros de La Makabra, que desde el mediodía de este sábado ocupan la antigua fábrica de Can Ricart en el barrio barcelonés de Poblenou, mantienen su reivindicación después de pasar allí toda la noche sin ocasionar incidentes.
Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana mantienen también el cordón policial que mantiene sitiado el lugar y que, bajo órdenes políticas, impide la entrada al recinto de personas, alimentos, bebidas y mantas.
"Tenemos hambre pero lo peor de todo es el frío, ya que no nos dejan entrar mantas en el recinto. Ayer llamamos a la Cruz Roja para pedir ayuda pero no han aparecido por aquí. Eso sí, nadie se ha marchado durante toda la noche y continuamos siendo unos 150", explicó a Europa Press la portavoz del colectivo, Gadis Romero.
Romero apuntó que, en un primer momento, un vecino burló el cordón policial y les trajo algo de alimentos pero que la policía "actuó rápidamente y ahora toda la casa está sitiada".
Junto con una multitud de personas que se acercó al lugar para solidarizarse con los okupas, también se personó anoche en Can Ricart el relator de la ONU en materia de vivienda, Miloon kothari.
En un primer momento, la policía no dejó entrar al relator aunque finalmente pudo acceder al recinto, después de minutos de negociación, acompañado por el presidente de la Asociación de Vecinos de Poblenou, Manel Andreu.
"Kothari nos ha dado respaldo en nuestra lucha contra la especulación y nos ha animado a continuar aquí dentro. Él considera que es una buena manera de luchar", aseguró Romero.
La portavoz del colectivo recordó que la ocupación de Can Ricart es "una reivindicación en contra del plan urbanístico del 22@ –que afecta a las fábricas de La Makabra y Can Ricart– y contra la especulación que no permite iniciativas populares".
"Queremos que la población se dé cuenta de la mafia que hay en Cataluña y en la Península en el ámbito de la construcción", apostilló.
Para este domingoa las 12 horas, el colectivo ha convocado una concentración-protesta de respaldo a los radicales en la que se invita a un concurso de "lanzamiento de cruasanes" por encima del cordón policial. Por otro lado, también está convocada una cacerolada a las 19 horas.