El palo le viene ahora a Bono de donde menos se lo podía esperar. De los amigos del presidente del Gobierno. Público se hace eco del enorme patrimonio del presidente del Congreso. "Los Bono tienen seis millones en patrimonio", titula la información Alicia Gutiérrez. Cierto que los datos no son nuevos porque ya los ha ido aireando La Gaceta –periódico al que cita–, pero lo extraño es que el reportaje pone en duda el origen de este patrimonio.
Dice Público:
- "El gran salto se produjo a partir de 2000: desde entonces, Bono y su familia han adquirido nueve viviendas, un local comercial y tres parcelas con una extensión total de 16 hectáreas, sobre las que se alza Hípica Almenara, la explotación equina del ex presidente castellanomanchego. Las propiedades aparecen escrituradas bien a nombre de alguno de los Bono o bien a nombre de las sociedades Hípica Almenara, Ahorros Familiares Saja o Attack 84, todas ellas propiedad de miembros de la familia".
Y compara con la situación anterior:
- "Hasta el año 2000, los bienes de la familia se ceñían a los siguientes: 3,7 hectáreas de suelo rústico y una vivienda en Salobre (Albacete), heredadas por Bono de sus padres; un piso de 137 metros en la colonia madrileña de Mirasierra; otro de 142 metros en Toledo y la casa familiar en Olías del Rey (Toledo), cuyos terrenos fueron comprados en 19952.
"El político sostiene que el incremento patrimonial tiene un origen lícito", dice la periodista cuestionando las explicaciones de Bono.
De "sorprendente operación" e "inusual" califica el periódico la "permuta rodeada de incógnitas" y "en condiciones muy favorables" de los apartamentos de Estepona.
También señala Público que sobre las facturas divulgadas por La Gaceta de la decoración de las viviendas "el presidente del Congreso no ha dado su versión".
Este sábado, el periódico de Roures también le dedicó un artículo crítico a Bono por hablar de "cara al sol" en Shanghai.
Cuando se le ha preguntado por su patrimonio, Bono siempre ha culpadado a los medios de "extrema derecha" de emprender una campaña de "calumnias" contra él. Que el periódico de Roures se haga eco del escándalo le tira por tierra este argumento.