Desde el pasado viernes Leganés, auténtico parque temático de la paleoizquierda a sólo 10 kilómetros de la Puerta del Sol, tiene un nuevo y polémico monumento. Se trata del monumento dedicado a los activistas propalestinos que murieron durante el enfrentamiento que se produjo entre el ejército de Israel y elementos violentos que viajaban a bordo del Mavi Marmara el pasado mes de mayo.
En el barco viajaban tres españoles. Un madrileño, Manuel Tapial, una catalana, Laura Arau, y un valenciano, David Segarra. Los dos primeros, miembros de la Asociación Cultura y Paz Haydee Santamaría (guerrillera castrista fallecida en 1980), han promovido la erección de monumento dentro de unas jornadas de extrema izquierda denominadas Festival Interpueblos, que durante la semana pasada se celebraron en las localidades de Leganés y Fuenlabrada gracias al generoso patrocinio de sus ayuntamientos, gobernados ambos por el PSOE.
Festival Interpueblos, izquierdismo radical subvencionado
Este festival, que ya va por su séptima edición, está concebido para, según los organizadores "acercar la solidaridad con Palestina e Iraq a nuestras ciudades de la mano del arte y la denuncia". La estrella este año ha sido el documental "Flotilla de la Libertad, un ataque a la Solidaridad", realizado por la activista Laura Arau. Junto a él se ha presentado otro vídeo también dirigido y realizado por Arau que lleva por título "Iraq, la destrucción de un país".
Aparte de proyectar documentales, la organización de Interpueblos ha programado una conferencia con varios ponentes, todos integrantes de la flotilla solidaria, un concierto de rock radical –celebrado en la Sala "El Grito" (sic) de Fuenlabrada– y sendas exposiciones de caricaturas de Azagra y Kalvellido, dos dibujantes de conocida filiación izquierdista. La del último estará expuesta en el Centro Cultural Julián Besteiro de Leganés hasta el próximo día 30.
Para rematar las jornadas, los organizadores convocaron una carrera popular con motivación política, "San Silvestre Leganense por Palestina" la han llamado y se celebró ayer. Esta peculiar y politizada San Silvestre tiene como objetivo, según los organizadores, "transmitir a los jóvenes una realidad de que de forma sistemática los medios tergiversan o callan".
Pero el momento cumbre de tanta "solidaridad" popular fue el homenaje a los activistas caídos en el Mavi Marmara durante la noche del 31 de mayo. Se realizó en un parque, el de Palestina, y se descubrió el monumento a la flotilla formado por un murete a medio construir y la estatua de un niño de corta edad jugando con una réplica del Mavi Marmara.
Monumento a la Flotilla
Al acto acudieron los dos activistas mencionados, los tres concejales de Izquierda Unida en el consistorio, el alcalde de la ciudad, Rafael Gómez Montoya, el embajador de Turquía en España, Ender Arat, y el delegado de la ANP en España, Musa Amer Odeh. Lo que sobraba de representantes "al más alto nivel" faltaba de vecinos y simpatizantes de la causa palestina, turca o solidaria. A las imágenes hay que remitirse para comprobar que fue un acto minoritario en grado extremo.
El acto lo abrió Manuel Espinar, padre de Manuel Tapial, un izquierdista radical muy conocido en las ciudades del sur de Madrid. Le sucedieron Laura Arau, el "embajador" palestino y el alcalde de Leganés. Como hacía mucho frío abreviaron y el acto se redujo a discursitos breves y muy políticamente correctos. Luego cada mochuelo a su olivo. El alcalde, que aparcó el coche oficial, conocido en Leganés como Sarkomovil por ser el mismo que utiliza Sarkozy, lo suficientemente lejos para que no se le viese bajar de él. Los "solidarios" se fueron por su cuenta para cerrar las jornadas Interpueblos en una cena de hermandad en la sede leganense de la asociación Cultura y Paz Haydee Santamaría.
Un insulto y un despropósito
El presidente del Partido Popular en la localidad, Jesús Gómez, no acudió al homenaje. Poco después de terminar se desplazó hasta el parque acompañado por un concejal popular y calificó el acto que acababa de tener lugar y el monumento como "un auténtico despropósito, un insulto a las víctimas del terrorismo de Hamas, al único estado verdaderamente libre y democrático de Oriente Medio que es precisamente Israel".
El líder del PP local considera que se trata de "una infamia para la ciudad de Leganés". Para Gómez el monumento "significa un acto de apología del terrorismo, a quien se está homenajeando aquí es a unos señores que hacen apología del terrorismo de Hamas. El señor Tapial dice que Hamas tiene la legitimidad moral para gobernar y defender la franja de Gaza".
El hecho es que Hamas es una organización terrorista reconocida como tal por la Unión Europea y, lo que es más, Jesús Gómez aseguró que "la organización turca que fletó este barco, el Mavi Marmara, está prohibida en Alemania por sus vínculos con Hamas, la yihad y el terrorismo islámico".
El Partido Popular de Leganés lamenta que "lo peor de todo es que ahora un consistorio democrático, con este monumento-infamia, está ofreciendo a los apologistas de Hamas un lugar de culto y peregrinación".