L D (Agencias) En una entrevista concedida al diario Avui, el líder de los populares catalanes ha pedido que Joan Rangel, delegado del Gobierno central en Cataluña, asuma la responsabilidad política por la crisis de El Prat "no sólo por no comparecer ante la opinión pública, sino por tardar muchas horas en tomar decisiones". "Ha quedado desautorizado no sólo para ejercer de delegado, sino para cualquier otra responsabilidad política", sentencia Piqué.
Por otra parte, Piqué ha asegurado que si no hay posibilidad de reeditar el tripartito, "el ganador de las elecciones será CIU", pero si esta formación pretende pactar con su partido, "la colaboración del PP no sería sólo parlamentaria, sino para participar de una manera cara en el gobierno". El líder del PPC ha dicho también que si una pareja gay le pidiera que les casara, "aplicaría la ley", a pesar de no ser alcalde. Piqué ha confirmado que "respeta la posición del alcalde de Madrid, así como la de los compañeros que lo critican".
Además, la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez y el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, comparecerán en el Congreso esta semana para informar de los sucesos ocurridos en el aeropuerto barcelonés de El Prat, por la huelga de los trabajadores del servicio de asistencia en tierra (handling) de Iberia. La Diputación Permanente del Congreso, órgano que dirige la Cámara en períodos vacacionales, el próximo martes día 8 dará el visto bueno a ambas comparecencias que, previsiblemente, serán el jueves 10. Ambos ministros han mostrado su disposición a comparecer de forma extraordinaria en las comisiones de Fomento e Interior respectivamente. La comparecencia de Alvarez ha sido pedida por todos los grupos de la oposición, mientras PP, CiU, PNV y CC-NC también reclaman la de Rubalcaba y la del ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla.
El 28 de julio el aeropuerto de Barcelona vivió una jornada de caos sin precedentes debido a la huelga ilegal del personal de servicios de tierra de Iberia que afectó a unos 100.000 usuarios y obligó a cancelar alrededor de 600 vuelos. Las instalaciones del aeropuerto quedaron prácticamente bloqueadas a partir de las 09.00 horas, tras la celebración de una asamblea del personal de servicios de tierra de Iberia que derivó en una huelga descontrolada y en la invasión de las pistas de rodadura y de sus vías de acceso.
El 28 de julio el aeropuerto de Barcelona vivió una jornada de caos sin precedentes debido a la huelga ilegal del personal de servicios de tierra de Iberia que afectó a unos 100.000 usuarios y obligó a cancelar alrededor de 600 vuelos. Las instalaciones del aeropuerto quedaron prácticamente bloqueadas a partir de las 09.00 horas, tras la celebración de una asamblea del personal de servicios de tierra de Iberia que derivó en una huelga descontrolada y en la invasión de las pistas de rodadura y de sus vías de acceso.
Grupos políticos, organizaciones de consumidores, agencias de viajes, compañías aéreas y asociaciones de aerolíneas han manifestado su rechazo por esta huelga no anunciada que tuvo lugar justo en plena temporada de vacaciones. El 3 de agosto la dirección de Iberia se reunió con el comité de empresa del personal de tierra en el aeropuerto de El Prat y se comprometió a garantizar la mayoría de los puestos de trabajo con varias medidas laborales y organizativas. La compañía aérea se comprometió a prestarse a sí misma las tareas de asistencia en tierra en El Prat (autohandling) medida que garantizará el mantenimiento de unos 1.300 puestos de trabajo de los 2.200 empleados que la aerolínea tiene en sus servicios de tierra en El Prat.