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Mueren siete personas en Wisconsin al disparar un adjunto al sheriff contra una fiesta de jóvenes

Un total de siete personas han resultado muertas por los disparos indiscriminados hechos por Tyler Peterson, un adjunto del sheriff del Condado de Oconto, al norte de Wisconsin (EEUU), que fue abatido por las fuerzas de seguridad. Los fallecidos, que se encontraban en una fiesta, tienen edades comprendidas entre los 17 y los 20 años. El motivo del tiroteo aún no se conoce, aunque una de las madres de una joven fallecida, de 14 años de edad, señaló "a los celos" como la posible causa del incidente.

L D (Agencias) El agente de policía local de Crandon, localidad del estado norteamericano de Wisconsin, que mató a siete personas e hirió a otra de gravedad tras comenzar a disparar indiscriminadamente, resultó muerto a consecuencia de los disparos de las fuerzas de seguridad.

El agresor llevaba trabajando 20 años para el Departamento del Sheriff del Condado de Forest y a tiempo parcial en el Departamento de Policía de Crandon, y en el momento del tiroteo se encontraba fuera de servicio, informó el Sheriff Keith Van Cleev. El superviviente ha sido hospitalizado y un miembro de la Policía fue ingresado por heridas leves.
 
Por celos
  
Tres de las víctimas estudiaban en el Instituto de Crandon, mientras que las otras tres ya se habían graduado. El motivo del tiroteo aún no se conoce, aunque una de las madres de una joven fallecida, de 14 años de edad, señaló "a los celos" como la posible causa del incidente. Por el momento, las clases del lunes han sido canceladas en la ciudad, informó Europa Press.

Tom Vollmar, de la oficina municipal del Condado de Forest -vecino a Crandon-, explicó que Tyler Peterson fue abatido por las fuerzas de seguridad tras los hechos acaecidos a las 03.00 horas local, por lo que ya son siete los muertos.

Entre 17 y 20 años

Algunos de los fallecidos, que se encontraban en una fiesta, tienen edades comprendidas entre los 17 y los 20 años, informó EFE.

De acuerdo con las declaraciones de varios testigos presenciales, Peterson disparó indiscriminadamente en una casa situada en el cruce de las calles Hazeldell y Washington de esta localidad, de unos 2.000 vecinos, donde se celebraba una fiesta. El barrio donde han ocurrido los hechos fue acordonado por las fuerzas de seguridad.

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