L D (EFE) Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Castellón confirmaron que los 18 muertos por inhalación de monóxido de carbono o gas, todavía por determinar, estaban celebrando el 50 cumpleaños de un vecino de Herbés en el albergue de San Cristóbal, del municpio de Todolella. En la fiesta habían participado unas cincuenta personas y las dieciocho que han muerto se quedaron a pasar la noche en el albegue. También otras dos, que dormían en una habitación contigua a la de las víctimas y que han salvado la vida.
El Delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé, ha confirmado que estos dos jóvenes se encuentran en perfecto estado de salud y no ha sido necesario, frente a lo que se informó en un primer momento por otras fuentes, su traslado a un centro sanitario.
El alojamiento está situado a diez kilómetros del centro de Todolella, una población de la comarca de Els Ports de tan sólo 136 habitantes, y es propiedad del Ayuntamiento. Los familiares tienen a su disposición el teléfono 963 42 80 25.
De las primeras investigaciones se desprende que el grupo encendió varias estufas para combatir el frío, pero una deficiente combustión hizo que inhalaran mortalmente monóxido de carbono o gas, todavía por determinar. Los cuerpos sin vida fueron encontrados hacia las cuatro de la tarde del domingo. Las víctimas, que tenían entre 25 y 40 años, eran vecinos de las localidades de Todolella, Villafanca, Morella, Forcall, Cinctorres y Portall de Morella. Los cuerpos fueron encontrados por los trabajadores del albergue, que avisaron a un médico de Forcall, que fue el primero en desplazarse al lugar del suceso.
La Generalidad valenciana ha enviado a tres psicólogos para que puedan asistir a los familiares de los 18 fallecidos. Además de las víctimas mortales, fuentes del Centro de Coordinación de Emergencias han informado de que hay otras tres personas que han sufrido problemas psicológicos, aunque no han podido precisar si formaban parte del grupo o son familiares.
El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, y el presidente valenciano, Francisco Camps, acompañado del vicepresidente y los consejeros de Sanidad y de Justicia, se han desplazado hasta el lugar de los hechos. Tanto el Gobierno autonómico como el PP de la Comunidad Valenciana y el PSPV han suspendido todos los actos previstos para este lunes.
La "muerte dulce" del monóxido
El forense José Antonio García Andrade ha explicado que el fallecimiento por inhalación de monóxido de carbono, conocida como la "muerte dulce", se produce sin que los afectados "se den cuenta del peligro" al caer en "un sopor".
El experto relató que "se trata de una muerte muy dulce que no da sensación de ahogo ni de asfixia". En la mayoría de los casos, las víctimas no se percatan de lo que está ocurriendo y en el supuesto de que se den cuenta, la inhalación les provoca una parálisis en las piernas "que les impide salir corriendo para buscar ayuda".
La "muerte dulce" puede producirse mientras las personas duermen y, por lo tanto, fallecen sin despertarse.
Si en este caso se tratara de un escape de gas en el albergue, la muerte se habría producido entre las víctimas "debido a los efectos directos de esa sustancia en el cerebro y las neuronas, pero el proceso habría concluido en lo mismo, en parada respiratoria".