L D (EFE) Un informe difundido por el Programa de la ONU contra el Sida (ONUSIDA) y la Organización Mundial de la Salud indica (OMS) destaca que "pese a las recientes mejoras en el acceso al tratamiento con antirretrovirales y la atención en muchas regiones del mundo, en el 2005 el Sida acabó con la vida de 3,1 millones de personas, entre ellos 570.000 niños".
Los infectados por el virus que causa la enfermedad aumentaron en todo el mundo, aunque se destaca la disminución de la incidencia de ese virus "entre los consumidores de drogas intravenosas en España y Brasil", así como entre los homosexuales en muchos países occidentales, los jóvenes de Uganda y los profesionales del sexo y sus clientes en Tailandia y Camboya.
Los expertos de ONUSIDA y la OMS señalan que la región del mundo con más infectados es Africa subsahariana, donde hay unos 25,8 millones de personas que padecen el virus que causa el Sida, lo que significa once millones más que en el 2003. Además de esa cifra que supone que las dos terceras partes de los enfermos por VIH viven en Africa, se señala que el 77 por ciento del total de mujeres seropositivas son africanas.
En el caso de Europa occidental y central son 720.000 las personas y los niños con el VIH, y de ellos 22.000 contrajeron este año ese síndrome, cuya prevalencia es del 0,3 por ciento entre los adultos de los países de esa región europea. El documento también señala que hay 1,8 millones de latinoamericanos con Sida y que de ellos 200.000 se infectaron en el 2005, mientras que en América del Norte son 1,2 millones los seropositivos, con un aumento de 43.000 en este año.
También se ha agravado la epidemia entre los países de Europa oriental, en especial en Rusia y los países de Asia Central, al igual que en China, Papúa Nueva Guinea y Vietnam. El estudio precisa que se está llegando a "niveles alarmantes" en Pakistán y Polinesia, y que en Asia, "las epidemias se extienden como resultado de la combinación de consumo de drogas intravenosas y comercio sexual".
En cuanto a los tratamientos con medicamentos antirretrovirales, los expertos indicaron que el acceso ha mejorado de forma palpable desde el 2003, y que ahora lo reciben enfermos que no sólo viven en Norteamérica y Europa Occidental.
El estudio agrega que "el consumo de drogas intravenosas está espoleando las epidemias de muchos países, incluidos India, Irán, Indonesia, Libia, Pakistán, España, Ucrania, Uruguay y Vietnam". Los infectados por el virus que causa la enfermedad aumentaron en todo el mundo, aunque se destaca la disminución de la incidencia de ese virus "entre los consumidores de drogas intravenosas en España y Brasil", así como entre los homosexuales en muchos países occidentales, los jóvenes de Uganda y los profesionales del sexo y sus clientes en Tailandia y Camboya.
Los expertos de ONUSIDA y la OMS señalan que la región del mundo con más infectados es Africa subsahariana, donde hay unos 25,8 millones de personas que padecen el virus que causa el Sida, lo que significa once millones más que en el 2003. Además de esa cifra que supone que las dos terceras partes de los enfermos por VIH viven en Africa, se señala que el 77 por ciento del total de mujeres seropositivas son africanas.
En el caso de Europa occidental y central son 720.000 las personas y los niños con el VIH, y de ellos 22.000 contrajeron este año ese síndrome, cuya prevalencia es del 0,3 por ciento entre los adultos de los países de esa región europea. El documento también señala que hay 1,8 millones de latinoamericanos con Sida y que de ellos 200.000 se infectaron en el 2005, mientras que en América del Norte son 1,2 millones los seropositivos, con un aumento de 43.000 en este año.
También se ha agravado la epidemia entre los países de Europa oriental, en especial en Rusia y los países de Asia Central, al igual que en China, Papúa Nueva Guinea y Vietnam. El estudio precisa que se está llegando a "niveles alarmantes" en Pakistán y Polinesia, y que en Asia, "las epidemias se extienden como resultado de la combinación de consumo de drogas intravenosas y comercio sexual".
En cuanto a los tratamientos con medicamentos antirretrovirales, los expertos indicaron que el acceso ha mejorado de forma palpable desde el 2003, y que ahora lo reciben enfermos que no sólo viven en Norteamérica y Europa Occidental.
Los expertos del Programa ONUSIDA calculan que para el conjunto de actividades relacionadas con la lucha contra el sida en el 2006 harán falta 15.000 millones de dólares, otros 3.000 millones en el 2007 y 4.000 millones más el año siguiente.