L D (Agencias) "La manifestación ha servido para constatar que hay una sociedad asombrada ante determinadas leyes que toca algo tan sensible como es el futuro de la familia que, asombrada y perpleja, se ha manifestado de manera desbordante. El trabajo de todos aquellos que han puesto su empeño en que estos se manifiesten ha tenido fruto y esperamos que tenga una respuesta adecuada de parte de quienes tienen la iniciativa de las leyes", aseguró Martínez Camino. A renglón seguido añadió: "Se ha pedido que la respuesta se replantee en esta legislación. Si hay suficientes votos en el Senado para que este cuerpo legislativo, al menos simbólicamente, en su capacidad, envíe la señal de que no es acertada la legislación mediante un voto de veto, la sociedad y la Iglesia recibirían el veto con alivio". Y es que, a juicio de los obispos, "hay otras salidas para defender los derechos de las minoría sin conculcar los de la mayoría".
Por otra parte, respecto a las declaraciones del catedrático y director del Departamento de Psicología de la Universidad San Pablo-CEU, Aquilino Polaino, el portavoz de la CEE señaló que no es competencia suya ni de los obispos decir qué es enfermedad y que no. "Si hay quienes lo dicen, habrá que ver los datos que aportan. No se puede dirimir con criterios a priori", declaró y se refirió a los derechos de todas las personas, remitiendo al Catecismo, no sin apostillar que "la inclinación homosexual es una inclinación objetivamente desordenada".
Martínez Camino expresó el desacuerdo de la Iglesia sobre una legislación "inaudita y desconocida" y se refirió a la supresión del Código Civil de la figura del esposo y de la esposa, que quedan, a su juicio, sin reconocimiento legal y sin protección adecuada a sus derechos. A continuación agregó que "no hay nada parecido a esto en ningún país del mundo". "La Iglesia dice que el matrimonio tiene que ser reconocido y tutelado", que la legislación que se plantea es "discriminatoria con las mayoría" y que, por lo tanto, es necesario el debate social.
También se refirió el secretario general de los obispos a la manifestación del pasado sábado, convocada por el Foro Español de la Familia, y declaró que es un "hecho nacional e internacional de gran calado". Con ella se demostró que "hay una sociedad viva, despierta y que aquí hay un problema de gran trascendencia". "Los obispos se congratulan del éxito de la sociedad española y de los que han trabajado para que la misma saliera adelante", añadió. "Los obispos piensan que ha sido positivo y que se ha hecho lo que se tenía que hacer", declaró Martínez Camino quien señaló que cuando está en cuestión la constitución de la familia, la postura de la Iglesia tiene que ser "clara y neta para que las generaciones futuras lo aprecien". Por otra parte, respecto a si los obispos secundarán la manifestación contra la pobreza que tiene lugar este fin de semana en Madrid, Martínez Camino dijo desconocer si acudirá algún obispo.
En cuanto a la campaña de sensibilización específica dirigida a la población homosexual para prevenir el contagio de SIDA que está diseñando el Ministerio de Sanidad y Consumo --según lo anunció hoy su titular, Elena Salgado en el Senado--, el portavoz de los obispos dijo desconocerla, pero se remitió a las "políticas" ya expuestas anteriormente por la CEE y explicó que las campañas monotemáticas son "inadecuadas" porque, a su entender, no frenan los contagios. Por contra, alabó las campañas "imaginativas" de otros países que han "diversificado los métodos" y explicó que "el acento hay que ponerlo en la prevención de las relaciones de riesgo de contagio, en la ordenación de conductas que eviten la promiscuidad y las relaciones indebidas".