L D (Agencias) El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha abierto una investigación para averiguar si se ha producido algún error judicial en la desprotección que ha sufrido Alba C.C., mientras que la Generalidad ha reconocido fallos por parte de la Administración.
Fuentes judiciales han informado que el juez ordenó la apertura de diligencias el pasado sábado 24 de diciembre, seis días después de que la niña acudiera por primera vez al Hospital por una fractura de un brazo y hematomas por todo el cuerpo, supuestamente causados por los malos tratos que recibía. Ese mismo día, los Mossos d'Esquadra recibieron órdenes de investigar el motivo de las lesiones de Alba, a través de un oficio enviado por correo a la sede de la Región Policial Metropolitana de Barcelona.
Según informó la Consejería de Interior, la carta no llegó a su destino hasta el 10 de enero, 18 días después. Los Mossos d'Esquadra activaron la orden el día 11 y, 24 horas más tarde, remitieron la información al Cuerpo Nacional de Policía (CNP) para que investigara los hechos, ya que la pequeña vivía en Montcada i Reixac, municipio que depende del CNP por no haberse desplegado todavía los Mossos en la zona.
Las mismas fuentes indicaron que el 12 de enero la Policía autonómica notificó al juez que habían remitido el caso a la comisaría de la Policía Nacional de Montcada i Reixac. Por su parte, la Policía Nacional dice que hasta el pasado 25 de enero no recibió un oficio del Juzgado de Instrucción número 4 de Barcelona para que investigara el caso y tomara declaración a la madre de la niña, que acusó al padre biológico --que reside cerca de Fraga (Huesca)- de causar las lesiones a la pequeña.
Por otra parte, la Policía Nacional comunicó al Juzgado de Instrucción número 2 de Cerdanyola del Vallès (Barcelona) que investigaría los hechos relatados por la ex esposa del padrastro de Alba C.C., que se encuentra en prisión provisional tras declarar ayer ante la juez de guardia de Barcelona. La mujer denunció el mes pasado ante la Policía Nacional de Montcada i Reixac los presuntos maltratos que éste infligía a la pequeña.
El padre de Alba: "Me siento inocente de todo"
Por su parte, el padre biológico de Alba, Álvaro Caldas indicó que "me siento inocente del todo" y rehusó hacer otros comentarios sobre la causa judical abierta contra él porque, señaló, el juez ha decretado el secreto del sumario. El hombre, que reside en la localidad oscense de Ontiñena, comentó que espera que se recupere pronto su hija y que se plantea pedir la custodia.
El pasado sábado fue detenido y posteriormente puesto en libertad en Fraga por unas declaraciones de su ex compañera sentimental y madre de la niña, Ana María C.F., que le responsabilizó, el día 2 de febrero, de haber causado el pasado mes de diciembre a la pequeña la fractura de un brazo y hematomas por todo el cuerpo.
Álvaro Caldas declaró este miércoles que vio a la niña el 20 de diciembre, dos días después de ocurrir esas supuestas agresiones, y que ella le comentó que las lesiones se las había producido al "caerse cuando saltaba en la cama". Reveló que el martes visitó a la niña en el hospital y que "es muy fuerte" verla "entubada", con los ojos cerrados "como un ángel", y que le dijeron que se encontraba estable dentro de la gravedad.
Caldas, que lleva más de cuatro años separado de su ex compañera, reconoció que tenía problemas para ver a su hija por los variables turnos de trabajo que debe cumplir y por las trabas que ponía su ex pareja. Asimismo confirmó que no conocía al actual compañero de la madre de su hija, al que sólo había visto un par de veces y que se encuentra en prisión como presunto autor de las últimas agresiones a la niña, que permanece muy grave desde el pasado domingo.
Alba C.C., de 5 años, continúa debatiéndose entre la vida y la muerte en el Hospital del Valle Hebrón de Barcelona con un fuerte traumatismo craneoencefálico que su madre y su padrastro, que el martes fue encarcelado por intento de asesinato, aseguraron que era producto de una caída accidental de la cama.
El TSJC ha iniciado un trabajo para revisar todos los expedientes y oficios relacionados con el caso de la niña, del que tuvieron conocimiento tres juzgados, uno de Barcelona, uno de Cerdanyola y otro de Fraga (Huesca).