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Los medios facilitados por Narbona para la extinción del incendio no estaban a punto

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, explicó en el Congreso que la sequía, el calor, el viento y los "efectos cada vez más evidentes del cambio climático" hacen muy difícil controlar los incendios. Según ella, "ningún medio hubiera podido detener la tragedia", pero según desvela El Mundo, en la documentación que facilitó a los diputados, que no leyó, consta que ocho medios aéreos tenían averías.  

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, explicó en el Congreso que la sequía, el calor, el viento y los "efectos cada vez más evidentes del cambio climático" hacen muy difícil controlar los incendios. Según ella, "ningún medio hubiera podido detener la tragedia", pero según desvela El Mundo, en la documentación que facilitó a los diputados, que no leyó, consta que ocho medios aéreos tenían averías.  
(Libertad Digital) El diario El Mundo aporta, este miércoles, la información facilitada por la propia ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, a los diputados que este martes se dieron cita en el Congreso para escuchar sus explicaciones sobre el devastador incendio de Guadalajara. Aunque la ministra prefirió obviarla en su comparecencia.
 
El helicóptero Kamov, informa el diario, no sólo salió con destino hacia Riba de Saelice media hora tarde sino que tuvo que parar hasta tres veces por perder las bolsas del agua. Es decir, hasta las 10:01 del domingo no estuvo del todo listo.
 
Al conocerse la existencia del fuego, la Junta de Castilla-La Mancha pidió medios anfibios. Enviaron un hidroavión desde la base de Torrejón (Madrid) e iban a mandar otro desde Los Llanos (Albacete), pero falló por la rotura del tren de aterrizaje. Por lo que aquél día, el Ministerio sólo pudo aportar, en realidad, un anfibio, una brigada helitransportada y un avión de coordinación. Los otros dos aparatos dieron problemas.
 
En los cinco días que duró el fuego hubo una constante petición de medios, sobre todo anfibios, por parte de la Junta, hasta el punto de que se tuvieron que solicitar dos a Francia. E incluso después de que las aeronaves francesas regresaran a su tierra se siguió reclamando ayuda anfibia.
 
Esto contrasta con el hecho de que los hidroaviones de la base de Matacán (Salamanca) no estuvieran el domingo disponibles porque los pilotos habían agotado sus horas de trabajo en los incendios de Zamora. O con que un anfibio estuviera inoperativo el lunes 18 en Valladolid por culpa de un buitre, y cuatro más tuvieran averías en la misma base de Matacán.
 
En el informe, explica El Mundo, se ve también, entre otras cosas, que los aviones del Ministerio se retrasaron casi tanto como los de las líneas aéreas convencionales, así como la toma de decisiones.
 
Narbona se cuidó de no detallar estas incidencias y mantuvo su tesis del "cambio climático" que hizo que "ningún medio hubiese podido detener la tragedia.

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