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Los maestros de Islam deberán tener un título universitario español y un curso sobre la Constitución

Los profesores que impartirán las clases de Islam en la escuela pública deberán tener un título universitario, preferentemente de Magisterio, cursado en España, haber recibido un curso sobre ordenamiento jurídico español y "hablar en perfecto castellano", según adelantó el secretario general de la Comisión Islámica en España, Ryay Tatari.

L D (Europa Press) Estos serán los requisitos que exigirá esta institución, interlocutora del Islam ante el Estado Español, encargada de proponer a los profesores que ocuparán las plazas ofertadas por la Administración en las ciudades con mayor presencia de población musulmana. Este asunto fue tratado la semana pasada en una reunión mantenida en el Ministerio de Justicia entre la directora general de Asuntos Religiosos, Mercedes Rico y Tatari, tras el acuerdo alcanzado el pasado 18 de noviembre para ampliar la plantilla de profesores de Islam en centros de Primaria y Secundaria durante el próximo año.
 
Hasta ahora, la enseñanza del Islam estaba presente sólo en centros de Ceuta y Melilla, pero estas clases se extenderán al resto de las comunidades autónomas durante el primer trimestre del próximo año. Por este motivo, en diciembre se reunirá la Comisión Sectorial de Educación para determinar las comunidades autónomas donde se crearán las plazas. Rico-Godoy ya anunció que serán aquellas con mayor presencia de población musulmana, como Madrid, Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana.
 
Tatari manifestó el interés de la Comisión Islámica en que los profesores sean idóneos e impartan las enseñanzas del Corán de acuerdo a los valores constitucionales y los derechos humanos. En este sentido, censura "las posturas reaccionarias" reacias a la presencia del Islam en los colegios españoles, teniendo en cuenta los tres años de esta experiencia en Ceuta y Melilla.
 
Separar el Islam del terrorismo
 
Por otra parte, el secretario general de la Comisión Islámica pidió a Rico-Godoy la colaboración del Gobierno para trasladar a la sociedad española "una imagen correcta sobre la realidad del Islam y la comunidad musulmana", separada de conceptos ligados a la violencia, el terrorismo, la inseguridad ciudadana, la violencia de género o la discriminación de las mujeres. Esta demanda va unida a la polémica suscitada por la excepción que establece el Reglamento de Extranjería para los imanes, que no deberán acreditar un permiso de trabajo para obtener la residencia en España. Sobre este punto, aseguró que la comisión realiza un "seguimiento" de los imanes con el fin de garantizar que no están relacionados con actividades delictivas.
 
"Estamos intentando que la Dirección General de Asuntos Religiosos sea explícita en su mensaje, hay un registro que abarca a todas las mezquitas y los musulmanes son ciudadanos que cumplen todos sus deberes", insiste Tatari.

Finalmente, la responsable de Asuntos Religiosos y el presidente de la Comisión Islámica hablaron sobre la fundación pública creada por el Gobierno para dar cobertura a las religiones minoritarias en campos educativos, sociales y culturales. Esta iniciativa está contemplada en el presupuesto para 2005, con una dotación de tres millones de euros y previsiblemente iniciará su andadura a lo largo del mes de enero. En la actualidad, se están redactando sus estatutos.

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