L D (Agencias) Durante su declaración en calidad de imputado, López Sors explicó que tomó la decisión en la tarde del 14 de noviembre, un día después de que el barco sufriese una brecha frente a las costas gallegas, y tras haber consultado y haberse asesorado técnicamente al respecto.
Según informa Europa Press, López Sors dijo que esta decisión se tomó teniendo en cuenta toda la información disponible, incluido el asesoramiento de técnicos y expertos y que fue la más adecuada dadas las circunstancias y la que menos ponía en riesgo la vida y la salud de las personas, las poblaciones y las rías gallegas.
El director general recordó que de las 40.000 toneladas de fuel derramadas por el Prestige se han recogido casi 30.000 toneladas en el mar, lo que supone una cantidad 30 veces superior a la recogida en el caso del "Erika", cuando se derramaron 10.000 toneladas y sólo se recogieron 1.000 en el mar. Esto demostraría que la decisión de alejar el buque fue eficaz.
López Sors insistió en que la Dirección General de Marina Mercante no recibió ninguna propuesta alternativa a alejar el barco por parte de la Xunta, los ayuntamientos, las cofradías de pescadores, las sociedades de expertos o de la armadora. Añadió que no se conoce un caso similar en el que un barco fuese trasladado a puerto y recalcó que la decisión se tomo respetando la normativa actual, que no permite traer a la costa un buque con daños estructurales graves.
En su declaración, el director general aseguró que el capitán del Prestige, Apostolos Mangouras, desobedeció las órdenes dadas y omitió la colaboración necesaria para salvar el buque. Además, indicó que el capitán desgobernó el buque al decidir que la mayoría de la tripulación abandonase el barco ante un riesgo de hundimiento que no era tan inminente.
López Sors explicó que la maniobra de Mangouras lastrando los tanques de babor del Prestige pudo ser la que originase la rotura del barco y también apuntó que el capitán no intentó en ningún momento volver a arrancar la máquina del buque a pesar de que se podía, como se demostró posteriormente.
Según informa Europa Press, López Sors dijo que esta decisión se tomó teniendo en cuenta toda la información disponible, incluido el asesoramiento de técnicos y expertos y que fue la más adecuada dadas las circunstancias y la que menos ponía en riesgo la vida y la salud de las personas, las poblaciones y las rías gallegas.
El director general recordó que de las 40.000 toneladas de fuel derramadas por el Prestige se han recogido casi 30.000 toneladas en el mar, lo que supone una cantidad 30 veces superior a la recogida en el caso del "Erika", cuando se derramaron 10.000 toneladas y sólo se recogieron 1.000 en el mar. Esto demostraría que la decisión de alejar el buque fue eficaz.
López Sors insistió en que la Dirección General de Marina Mercante no recibió ninguna propuesta alternativa a alejar el barco por parte de la Xunta, los ayuntamientos, las cofradías de pescadores, las sociedades de expertos o de la armadora. Añadió que no se conoce un caso similar en el que un barco fuese trasladado a puerto y recalcó que la decisión se tomo respetando la normativa actual, que no permite traer a la costa un buque con daños estructurales graves.
En su declaración, el director general aseguró que el capitán del Prestige, Apostolos Mangouras, desobedeció las órdenes dadas y omitió la colaboración necesaria para salvar el buque. Además, indicó que el capitán desgobernó el buque al decidir que la mayoría de la tripulación abandonase el barco ante un riesgo de hundimiento que no era tan inminente.
López Sors explicó que la maniobra de Mangouras lastrando los tanques de babor del Prestige pudo ser la que originase la rotura del barco y también apuntó que el capitán no intentó en ningún momento volver a arrancar la máquina del buque a pesar de que se podía, como se demostró posteriormente.