L D (EFE) Según informaron fuentes del Centro Meteorológico de Baleares, alrededor del 75 por ciento de los rayos que cayeron entre las 12.00 horas del pasado viernes y el mediodía de este sábado lo hicieron sobre el mar, aunque destacaron lo relevante de la abundancia del aparato eléctrico que caracteriza a las precipitaciones que se registran en las islas.
Esta incidencia tuvo como consecuencia interrupciones en el suministro de la compañía eléctrica Gesa Endesa en las zonas de S'Arenal (Mallorca), que perjudicó a 1.300 usuarios; Playa d'en Bossa (Ibiza), con 1.700 clientes afectados, y Mahón (Menorca), que dejó sin luz a 1.800 abonados.
En el aeropuerto de Palma, se activó la alerta por incidencias meteorológicas y entre las 9.30 y las 10.30 horas se aplicó el protocolo de contingencias por tormentas, que impide a los aviones repostar combustible mientras caen rayos en las inmediaciones de las pistas. Este hecho motivó retrasos de un promedio cercano a los 30 minutos en el 60 por ciento de las 199 operaciones de llegada y salida que se habían registrado en Palma hasta las 12.00 horas.
En el aeropuerto de Mahón, donde también se aplicó el protocolo por tormentas, se registraron demoras en la cuarta parte de los 24 operaciones realizadas hasta mediodía, también con un media de 30 minutos de retraso, y se cancelaron dos vuelos que debían llegar desde Barcelona y volver a esta ciudad. Estas suspensiones se unieron a la cancelación por parte de la naviera Balearia del trayecto de ida y vuelta entre Menorca y la capital catalana que debía cubrir este sábado el buque "Ramón Llull".