L D (EFE) Esta solicitud fue realizada en el marco de los Cursos de Verano del Escorial, donde participó con la ponencia ¿Para qué debe servir una ley de Propiedad Intelectual en el siglo XXI?, y en la que remarcó la importancia de fomentar, desde la infancia, que "el niño se sienta creador, a partir de ahí, tendremos también una industria importante".
Bautista apostó por proteger al creador y su obra, frente a la otra corriente del copyright, que defiende los intereses del negocio, porque, explicó, "si existiera un nuevo Renacimiento en Europa, ésta no llegará de mano de las empresas, que se mueven por el principio del valor de sus acciones" en el mercado.
Lo importante, dijo, es fomentar "un cierto equilibrio", y no actuar como el anterior Gobierno del PP que pretendía crear una ley "sin tener en cuenta el valor estratégico de la cultura en España, sus antecedentes y el respeto a la diversidad de ésta", y considerar que lo importante era que "las televisiones consigan el éxito económico en detrimento de los derechos del autor".
Bautista deseó que la nueva ley sea tan importante como la de 1986, "consensuada entre todos y que fue copiada por diferentes países tanto europeos como iberoamericanos", a la que, por cierto, explicó, "sólo hay que incorporarle algunos retoques de cara a los nuevos retos". Se trata pues, dijo, de "un pacto social para evitar la quiebra de los valores de la sociedad", que se basa en leyes de consenso porque "si disculpamos la piratería, se vulnera la ética".
Respecto a la nueva medida del Gobierno que obliga a las televisiones a invertir el cinco por ciento de sus ingresos globales en la financiación de películas españolas y europeas, el presidente de la SGAE, afirmó que "cualquier iniciativa para fomentar la producción cinematográfica y la calidad es positiva", aunque el apuesta por un conjunto de acciones que contribuyan al respeto a los creadores y no sólo a la producción".
Bautista apostó por proteger al creador y su obra, frente a la otra corriente del copyright, que defiende los intereses del negocio, porque, explicó, "si existiera un nuevo Renacimiento en Europa, ésta no llegará de mano de las empresas, que se mueven por el principio del valor de sus acciones" en el mercado.
Lo importante, dijo, es fomentar "un cierto equilibrio", y no actuar como el anterior Gobierno del PP que pretendía crear una ley "sin tener en cuenta el valor estratégico de la cultura en España, sus antecedentes y el respeto a la diversidad de ésta", y considerar que lo importante era que "las televisiones consigan el éxito económico en detrimento de los derechos del autor".
Bautista deseó que la nueva ley sea tan importante como la de 1986, "consensuada entre todos y que fue copiada por diferentes países tanto europeos como iberoamericanos", a la que, por cierto, explicó, "sólo hay que incorporarle algunos retoques de cara a los nuevos retos". Se trata pues, dijo, de "un pacto social para evitar la quiebra de los valores de la sociedad", que se basa en leyes de consenso porque "si disculpamos la piratería, se vulnera la ética".
Respecto a la nueva medida del Gobierno que obliga a las televisiones a invertir el cinco por ciento de sus ingresos globales en la financiación de películas españolas y europeas, el presidente de la SGAE, afirmó que "cualquier iniciativa para fomentar la producción cinematográfica y la calidad es positiva", aunque el apuesta por un conjunto de acciones que contribuyan al respeto a los creadores y no sólo a la producción".