L D (EFE) El alcalde de Mas de Barberans explicó que la chica presentaba un disparo en la boca y su novio en la garganta, de lo que se deduce que "posiblemente" se trate de un suicidio doble acordado de forma "premeditada".
Según fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Tarragona, la principal línea de investigación "parece" apuntar a que se trata de un caso de violencia de género y que el chico, Albert S.LL., de 18 años, disparó a su novia, Melody LL. LL., de 15, y después decidió acabar con su vida con la misma escopeta.
Sin embargo, la Guardia Civil, que ha asumido la investigación del crimen, no descarta ninguna línea de investigación, entre ellas la posibilidad de que los dos jóvenes decidieran suicidarse en un acuerdo mutuo, una versión que también ha apuntado el alcalde de Mas de Barberans, Francesc Subirats. Subirats, que se ha personado hacia las 7:00 horas en el garaje donde se han hallado los cadáveres, explicó que la chica presentaba un disparo en la boca y su novio en la garganta, de lo que se deduce que "posiblemente" se trate de un suicidio doble acordado de forma "premeditada".
El alcalde señaló, sin embargo, que la abuela del joven, que vive en la misma casa donde se han encontrado los cadáveres, escuchó hacia las tres de la madrugada voces procedentes del garaje, "como si estuviera ocurriendo una discusión". También los vecinos de la calle del Molí, donde está situada la vivienda de los padres del chico, aseguraron haber escuchado "algunos gritos" en la calle hacia las cuatro de la madrugada, lo que les pareció "extraño", ya que el pueblo suele estar desierto la noche anterior a un día laborable.
Poco después, los vecinos oyeron un fuerte golpe, que podría ser consecuencia de uno de los disparos, aunque pensaron que había sido provocado por el intenso viento que soplaba la pasada noche en Mas de Barberans. Los vecinos de Mas de Barberans, municipio de poco más de 700 habitantes en el que la pareja era muy conocida, abonan también la hipótesis de que se trató de un doble suicidio porque, a su juicio, el chico no era violento y difícilmente podría haber llegado a cometer un crimen similar.
Como el alcalde, los vecinos del municipio mantienen que la pareja había mantenido algunas pequeñas discusiones, pero que nunca se les conoció una riña de importancia y que, aparentemente, no había motivos para que el joven matara a su novia. El arma que ha acabado con la vida de los dos jóvenes es una escopeta de caza que pertenecía al padre del chico, según confirmó el alcalde de Mas de Barberans.