LD (EFE) Investigadores de la policía de Versalles han comenzado a excavar el jardín de una casa ubicada en el centro de Clairefontaine (a las afueras de París) en busca de nuevos cadáveres que podrían haber sido enterrados allí por Fourniret, el cuál vivió en esa localidad entre 1966 y 1984.
Fourniret ha admitido nueve crímenes perpetrados entre 1987 y 1990, y entre 2000 y 2001, pero la justicia no cree que haya estado inactivo durante diez años. Las policías francesa y belga temen que Fourniret haya matado a muchas más víctimas que las diez que su esposa Monique, presunta cómplice en parte de los secuestros, le atribuye.
Por otra parte, el ministro de Justicia francés, Dominique Perben, ha reconocido que es “insuficiente” la respuesta que la ley aporta a los casos de liberación condicional de delincuentes sexuales, en referencia al tema de la excarcelación de Fourniret, producida en 1987, tras haber cumplido sólo tres de los cinco años de prisión firme a los que había sido condenado por violaciones de menores.